Última advertencia: Reducción de emisiones desde 2025 o será el caos climático
Las emisiones de gases de efecto invernadero deben comenzar a disminuir en los próximos años para desaparecer casi por completo en 2050, advierte el informe del Grupo de Trabajo III del IPCC. “Algunos líderes gubernamentales y empresariales dicen una cosa, pero hacen otra. Están mintiendo”, apuntó Antonio Guterres.
Lunes 4 de abril de 2022 | 22:54
¡Ahora! "Sin una acción inmediata y reducciones profundas de las emisiones de gases de efecto invernadero en todos los sectores de la sociedad, el limitar el calentamiento global en 1,5 °C está fuera de nuestro alcance", sostuvieron los expertos del Grupo de Trabajo III (GT-III) del Panel Internacional de Cambio Climático (IPCC) al evacuar las conclusiones con respecto a la mitigación.
La principal deducción del reporte es que las liberaciones de gases de efecto invernadero (GEI) deben decaer a partir de 2025 para terminar casi por completo con la quema de petróleo, gas y carbón al año 2050. El problema es que los gobiernos más contaminantes del mundo, después de la pandemia por el COVID-19, han explicitado sin remordimientos que las emisiones seguirán creciendo, por lo menos, durante la presente década.
Lo anterior desembocará en que la temperatura promedio del planeta suba más de 3 °C durante la segunda mitad de este siglo, lo cual acelerará el proceso de extinción masiva que ya está en marcha y, simplemente, hará casi inhabitable el planeta para los seres humanos. Así es que las reducciones "rápidas, profundas e inmediatas" de dióxido de carbono (CO2) quedarían guardadas en el baúl de las recomendaciones hechas por la comunidad científica mundial.
"Es hora de dejar de quemar nuestro planeta y comenzar a invertir en la abundante energía renovable que nos rodea", comentó Antonio Guterres, secretario general de Naciones Unidas (ONU).
"El último informe IPCC es una letanía de promesas climáticas incumplidas. Algunos líderes gubernamentales y empresariales dicen una cosa, pero hacen otra. Están mintiendo. Los grandes emisores están destruyendo la Tierra, porque no quieren renunciar a sus inversiones históricas en combustibles fósiles", criticó con énfasis Guterres.
¿Cuál es el camino?
Para que el Acuerdo de París (2015) sea realizable, señala este informe, el consumo de carbón debe reducirse en 95%, el petróleo en 60%, el gas en 45% y el metano (CH4) en un tercio. Para ello urge implementar las "políticas, infraestructuras y tecnologías adecuadas para permitir que cambien nuestros comportamiento y estilo de vida", aseguró Priyadarshi Shukla, copresidente del GT-III.
El reporte reconoce que la transición a las energías limpias supondría pérdidas millonarias de dinero debido al cambio de las infraestructuras actuales. "Alrededor del 30% del petróleo, el 50% del gas y el 80% de las reservas de carbón deberían dejarse sin extraer" para cumplir con lo comprometido.
Para que, al menos, se intenten materializar estos cambios se requiere el impulso de la ciudadanía. Eso lo tienen más que claro Antonio Guterres quien sostiene que "los activistas climáticos a veces son representados como radicales peligrosos. Pero los radicales verdaderamente peligrosos son los países que están aumentando la producción de combustibles fósiles. Invertir en nueva infraestructura de combustibles fósiles es una locura moral y económica".
Las claves
A continuación, resumimos algunos de los puntos más trascendentes del informe de casi 3.000 páginas del GT-III del IPCC:
- Las emisiones de gases de efecto invernadero deben comenzar a disminuir a partir de 2025 para alcanzar la neutralidad en 2050, mientras que la liberación de metano debe reducirse en un tercio a 2030.
- Aunque estos recortes se logren, algo imposible en las actuales condiciones, "es casi inevitable" que la temperatura promedio del planeta supere los 1,5 °C.
- Se deben incentivar las "dietas saludables y sostenibles" con énfasis en los alimentos de origen vegetal.
- Actividades como la agricultura deben reducir considerablemente sus emisiones.
- Aumentar el financiamiento que, en la actualidad, es 3 a 6 veces más bajo que los niveles requeridos para 2030.
- Adaptar las ciudades mediante la creación de entornos transitables, transporte público eléctrico, fachadas verdes, agricultura urbana y parques.