Estuvo desaparecido por 10 años y ahora encontraron su cuerpo detrás de un refrigerador en supermercado
El joven había desparecido en noviembre de 2009, cuando huyó luego de que sostuviera una discusión con la familia. El padre del fallecido comentó que estaba actuando de manera irracional, ya que estaba bajo medicamentos por su tratamiento psiquiátrico.
Martes 23 de julio de 2019 | 16:55
Trabajadores que retiraban armarios y refrigeradores de un antiguo supermercado No Frills en Council Bluffs, Iowa, descubrieron un cuerpo detrás de uno de ellos.
Los restos fueron identificados recientemente como los de Larry Ely Murillo-Moncada, un exempleado que había sido reportado como desaparecido el 28 de noviembre de 2009.
Los investigadores usaron el ADN de sus padres para confirmar la identidad, y la ropa coincidía con la descripción de su atuendo en el momento en que fue reportado como desaparecido, según el capitán de la policía de Council Bluffs, Todd Weddum.
Los padres de Murillo-Moncada informaron que su hijo desapareció después de que él se enojó y salió corriendo de su casa. Le dijeron a la policía en ese momento que estaba actuando de manera irracional, posiblemente debido a los medicamentos que estaba tomando por su tratamiento psiquiátrico, dijo Weddum.
Lee también: Vecinos reclamaron por ruidos molestos y policía que llegó terminó arriba del toro mecánicoLos oficiales contactaron a miembros de la familia, otras agencias de fuerzas del orden, centros de detención cercanos e incluso a la Agencia de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (había sido deportado a Honduras antes de regresar a Estados Unidos), pero no recibió información sobre su posible paradero.
Los investigadores ahora creen que Murillo-Moncada fue al supermercado y se subió a los refrigeradores. El espacio se usaba como almacenamiento de mercancías, dijo Weddum, y los empleados a veces iban a esconderse cuando querían tomar un descanso no oficial.
Se cree que cayó en la brecha de 45 centímetros entre la parte trasera del enfriador y una pared, donde quedó atrapado. El ruido de los compresores de los refrigeradores puede haber ocultado cualquier intento de pedir ayuda, según Weddum.
Una autopsia no encontró signos de trauma, y el caso ha sido considerado una muerte accidental.