Raúl Muñoz analizó el comportamiento del único detenido por el crimen de Tomás Bravo, especialmente cuando acompañó las labores de búsqueda. "Las manos detrás y tomadas, desde el punto de vista técnico, evidencian una absoluta seguridad respecto de cómo ir guiando a los rescatistas en la dirección que a él más le acomoda", aseguró.