Siete pacientes críticos fueron trasladados a diferentes recintos hospitalarios tras la rotura de una matriz al interior del edificio. El hecho provocó la inundación de uno de los pabellones y el corte del suministro de agua, situación que obligó a cerrar la atención de urgencias infantil y de adultos. La Subsecretaría de Redes Asistenciales exigió a la empresa sanitaria Esval responder ante la grave falla.