El "hombre pollo" se picó y atacó a los chilenos tras la patada de Jara: "Nacieron traidores y traidores morirán"

El hincha que interrumpió el duelo entre Chile y Uruguay fue detenido por la policía. El informe indicó que estaba bajo efecto de las drogas y "completamente alterado, sin lucidez". Al ser liberado se lanzó con todo contra Chile.

Miércoles 26 de junio de 2019 | 09:40

Más allá a de la derrota de la Roja por uno a cero ante Uruguay en la Copa América Brasil 2019, hubo un hecho que ocurrió durante el partido de este lunes que no pasó desapercibido. El fanático que ingresó corriendo a la cancha con una máscara.

Lo particular de esta escena, fue la patada (o zancadilla) que Gonzalo Jara le propinó y que terminó con este “hombre pollo” en el suelo y reducido por los guardias.

Te puede interesar: Jara le pegó una patada a hincha y Suárez salió corriendo exigiendo que le pongan tarjeta roja

El sujeto identificado como Pablo Benjamín Loyudice Gonzales Llanos, fue detenido a la policía y posteriormente llevado hasta una comisaría. Se trata de un ciudadano español que está radicado en Argentina.

Según indicó el parte policial dado a conocer por 24 Horas, el sujeto estaba bajo los efectos de alguna droga y "completamente alterado, sin lucidez". Además, indicaron que intentó agredirse y golpear al personal policial.

Gracias a la intervención del consulado español, Pablo pudo salir en libertad. Ahí lo esperaba el periodista Iván Núñez del citado medio, quien al intentar hablar con él recibió una tajante respuesta.

Lee también: ¿Arriesga sanción? La zancadilla de Jara al “hombre pollo” podría costarle caro

"Gente toda menos chilena, los chilenos ya nos traicionaron una vez con las Malvinas, y me traicionaron ayer en la cancha. Así que chilenos, nacieron traidores y traidores morirán. Quiero que lo sepan", indicó.

La Cuarta también pudo conversar con el “hombre pollo” vía mensaje, donde afirmó que “tengo el ojo morado por la patada que me pegó Jara, quiero denunciar”.

Además, contó que habría sido víctima de violencia mientras estuvo detenido. “Me golpearon tanto que tengo todo el cuerpo moreteado”, aseguró.

Loyudice quedó en libertad, pero con la medida cautelar de no acercarse a 5 km de cualquier estadio de Brasil y con una firma mensual mientras dure el proceso.