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¿Se animará con uno de potito?: La historia del nuevo ayudante técnico de Católica que vendía choripanes afuera del estadio

Darío Sala se instalaba afuera del estadio de Instituto de Córdoba para vender “panchos” y churros en el puesto familiar "El Dante", antes de convertirse en jugador profesional en los 90.

Viernes 28 de diciembre de 2018 | 17:46

La historia del barrio, la pelota de trapo, la cancha de tierra. Todos son lugares comunes que hemos escuchado mil veces en la historia o biografía de algún jugador de fútbol que, tras el retiro, mira hacia atrás y ve cómo logró torcerle la mano al destino. Pero la historia de Darío Sala, el nuevo ayudante técnico del DT Gustavo Quinteros en Universidad Católica, sale de los cánones corrientes antes descritos y cuenta una historia digna de un “patiperro”.

Resulta que Sala, quien hizo una carrera brillante a partir de la década del 90 como arquero de River Plate, San Lorenzo de Almagro, Independiente, Deportivo Cali y el FC Dallas de los Estados Unidos, antes vendió churros y choripanes en la puerta del estadio de Instituto de Córdoba, donde se encontraba el carrtio familiar de venta de comida rápida "El Dante", en el sector de parque Sarmiento en Córdova, puesto que aún permanece vigente y desde donde Sala tuvo realmente su primer acercamiento al deporte rey.

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Según consigna La Segunda, el ex arquero y ahora miembro del cuerpo técnico cruzado, ha tenido una vida azarosa y llena de casualidades. Así lo reconoció él mismo en una entrevista para diario Clarín en 2011, cuando dijo: “soy un buscavidas profesional”, refiriéndose a los diversos oficios que ha practicado, además del fútbol y maestro sanguchero y churrero.
En la lista de empleos ejercidos por Sala también se encuentran paseador de perros, administrador de derechos deportivos, representante de jugadores, productor de TV y columnista. En tanto, sus más cercanos lo describen como un sujeto extrovertido y muy bueno para contar chistes.

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