Los descargos de Pinilla tras su bullada salida de la U: “Esta ha sido la peor experiencia de mi vida”

La repentina salida de Mauricio Pinilla de Universidad de Chile ha sido una de las más caóticas y bulladas del último tiempo en el club azul. Las condiciones que hicieron que Pinigol emigrara del club de sus amores aún siguen causando noticia y parece estar lejos de acabar.

Este jueves El Mercurio publicó una extensa entrevista donde el artillero entregó su versión de los hechos, instancia donde aprovechó de repasar a Frank Darío Kudelka, Azul Azul, Ronald Fuentes y alabar lo realizado por Ángel Guillermo Hoyos.

“La Universidad de Chile la hace grande su hinchada y su gente, no ellos (Azul Azul)”, expresó el delantero que mientras explotaba este escándalo a mediados julio, tuvo un frustrado traspaso a Colón de Santa Fe de Argentina.

El atacante que tuvo paso por 13 clubes europeos antes de volver a la U, aseguró que el club “no se maneja como el equipo grande que es”, y también aprovechó de lanzarle dardos al estratega trasandino: “El club y el técnico nunca se negaron a que me fuera, nunca me dijeron que me quedara. Hablé con Kudelka y en ningún momento me pidió que siguiera. Seguramente estaba alineado con lo que quería la institución”.

Por otro lado, Pinilla también apuntó a cómo se manejan las cosas en la interna de la institución, criticando la falta de empatía y protección a los futbolistas: “Acá, a los jugadores de la U se les expone. Hay cero protección a diferencia de los rivales y archirrivales, donde les ponen el escudo en el pecho y los protegen, y añadió: “Pensé encontrarme con un club y me encontré con una empresa”.

Respecto a la relación que mantuvo con la dirigencia, especialmente con Carlos Heller y Ronald Fuentes, aseveró: “Pasé a ser un enemigo por defender los derechos de mis compañeros”.

Finalmente, criticó el despido de Ángel Guillermo Hoyos responsabilizando de su salida al gerente deportivo del club, Ronald Fuentes: “(Fuentes) tenía una guerra con Hoyos, le hizo la vida imposible y lo sacó en el periodo malo”, para rematar contando una infidencia de cómo la ex figura azul de la década de los ’90 se manejaba con los jugadores: “Al brillante de Ronald Fuentes se le ocurrió un día cobrarnos los zapatos de los trajes que nos mandaron a hacer. A mí no me molestaba, pero cobrárselos a los chicos que ganan 350 o 400 mil pesos… llegar a una habitación en la concentración a las 15 horas y que recién cuatro horas después llegara el agua porque abarataban costos, qué te dice eso. Te habla de un manejo pésimo”, remató.