Ignacio Montano se desempeñaba en la rama femenino del cuadro árabe y fue desvinculado a raíz de la denuncia de Emilia Pastrián, futbolista del equipo, y a la que luego se sumaron las de Natalia Paredes, de Coquimbo Unido, y Sofía Sáez, jugadora de Unión Española.