Asesinó a sus dos hijos por creer que tenían "ADN de serpiente" y dijo haber sido "iluminado" por teorías conspirativas
El hombre de 40 años confesó el crimen argumentando que "era el único curso de acción que salvaría al mundo". Un suceso que terminó con la vida de una guagua de 10 meses y un niño de 2 años, quienes fueron vistos por última vez el pasado sábado cuando su padre los llevó a un hotel en México para concretar el terrible crimen.
Jueves 12 de agosto de 2021 | 19:57
Luego de una extensa investigación que se inició el sábado a raíz de una denuncia por presunta desgracia, se logró dilucidar un caso que remeció a Estados Unidos. Matthew Taylor Coleman, de 40 años, fue acusado de asesinar a sus pequeños hijos por influencia de teorías conspirativas relacionadas con QAnon e Illimunati.
De acuerdo con la denuncia penal, este hombre mató a su hijo de 2 años y a su hija de 10 meses, por creer que "iban a convertirse en terribles monstruos", alegando que dichas teorías lo llevaron a pensar que su esposa y madre de los niños, les había traspasado un "ADN de serpiente".
El dueño de una tienda de surf en California, fue procesado este miércoles por el delito de asesinato en el extranjero de ciudadanos estadounidenses, según precisó la Fiscalía Federal para el Distrito Central de California.
En su declaración al FBI, el sujeto reveló que asesinó a los menores de edad con una pistola de pesca submarina, entregando antecedentes sobre el lugar donde dejó abandonados los cuerpos, permitiendo el hallazgo de ellos y su posterior reconocimiento.
Lee también: Congreso brasileño destituye a diputada acusada de haber mandado a matar a su maridoSegún la investigación, el individuo acudió junto a sus hijos a un hotel en Tijuana, México, durante el pasado sábado. Fue en la madrugada del lunes que las cámaras del recinto captaron a Coleman saliendo del lugar y regresando después junto a los niños. Pero en una segunda salida, los menores no fueron vistos nuevamente.
Las autoridades mexicanas reportaron que testigos fueron quienes alertaron el hallazgo de los cuerpos en las cercanías de un rancho, a 30 kilómetros del hotel, consignó ABC News.
La detención de Coleman se llevó a cabo en San Diego, luego de cruzar la frontera a través del puente San Ysidro. En esa instancia, habría confesado el crimen y revelado dónde ocultó el arma con que cometió el delito.
Cabe señalar que la madre de los niños y pareja de Coleman, había contactado a la policía de Santa Bárbara preocupada por el estado de salud de ellos, ya que en su declaración aseveró que salieron con rumbo desconocido y que pese a que habían pasado las horas, aún no regresaban y él no respondía sus mensajes.
Fue al día siguiente de esta denuncia que la policía instó a la mujer a usar su función de Find My iPhone de Apple para intentar dar con el paradero del sujeto, y el programa evidenció que su última locación captada fue en Rosarito, México.
Esta situación dio paso a la investigación del FBI por un presunto secuestro. Fue así que finalmente, cuando se identificó a Coleman tras su paso hacia Estados Unidos, comenzaron las indagatorias para dar con el paradero de los menores que no fueron encontrados en el auto del sospechoso durante su inspección.
En su declaración, Coleman señaló que tenía claro lo que había hecho, pero que "era el único curso de acción que salvaría al mundo", argumentando haber sido "iluminado" por dichas teorías conspirativas.
Luego de su detención, la lectura de cargos del hombre de 40 años quedó fijada para el próximo 31 de agosto.