Con flores y abrazos: Niños que combatieron juntos el cáncer se reunieron luego que entraran en periodo de remisión

“Nuestro dulce, tonto y hermoso bebé tiene cáncer. Esa palabra temida que ninguna familia quiere escuchar”, así comienza relatando la historia Dani Hancock, madre de Macky, niño diagnosticado con cáncer.

Según cuenta su progenitora, llevó a Mack a una sala de emergencias después de 3 semanas de estar "apagado". Tenían una sospecha de neumonía, ya que la prueba de COVID-19 resultó negativa.

"El miércoles se despertó de su siesta luchando por respirar, después de un tratamiento respiratorio en vano. Decidimos que era hora de irnos. En la sala de emergencias, también especularon sobre neumonía o posiblemente asma. Después de otro tratamiento respiratorio, le hicieron una radiografía de tórax, y aquí es donde nuestro mundo se hizo añicos", relata Dani.

En ese entonces, la radiografía mostró una masa grande en su pequeño pecho a sus 2 años de edad. Muy rápidamente, lo llevaron para una tomografía computarizada, hablaron con un oncólogo y Macky, como lo llaman sus cercanos, ingresó a la UCI pediátrica.

En ese sentido, sus biopsias se enviaron a los principales especialistas del rubro. “Estamos avanzando con fe y confianza en el equipo de médicos de Mack, y con gratitud porque se está haciendo todo lo posible para asegurarse de que su diagnóstico sea exacto. Estamos esperanzados y llenos de oración”, relata la mamá de Mack en su cuenta oficial de Facebook, cuando aún no sabían en específico qué tipo de cáncer tenía.

Sin embargo, como se puede apreciar en un sitio web destinado a donaciones y cualquier tipo de información del caso, finalmente a Macky le diagnosticaron linfoma anaplásico de células grandes en estadio 3 el 2 de febrero de 2021.

En ese contexto, Mack, comenzó a tratar su enfermedad en el "Phoenix Childrens", un hospital ubicado en el estado de Arizona en Estados Unidos, que se especializa en cuidado agudo de niños y niñas.

En ese momento, conoció a Payson, niña que también sufre de cáncer. Se hicieron amigos por varios meses mientras estaban en el centro asistencial, pero ambos tuvieron que separarse y regresar a sus casas cuando comenzaron su periodo de remisión, es decir pasaron de verse todos los días a no hacerlo más.

Pero gracias a sus padres, Macky y Payson, pudieron volver a reunirse para pasar una tarde entretenida. Ahí, Mack le llevó un ramo de flores a Payson, quien de manera inmediata lo abrazó y disfruto de un baile junto a él.

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No solo bailan, juegan y se dan regalos, sino que también se reúnen de manera amistosa para nadar en la piscina.

A 200 días de su diagnóstico

Incluso, el pasado 9 de agosto, su madre publicó un registro en el cual se detalla todo el camino que recorrió Mack, a 200 días que le diagnosticaron cáncer.

"En esos 200 días lo hemos visto sonreír, reír y jugar durante algunos de los días más difíciles. Se ha sentido como si estuviéramos existiendo en dos mundos diferentes a la vez. Mack ha crecido ante nuestros ojos, desde un niño pequeño hasta un niño. 200 días llenos de héroes de la vida infantil, enfermeras notables, terapeutas de pacientes de todo tipo, médicos increíbles y muchos otros que se han hecho amigos en el camino".