"No es abuso, es incesto": Empresario argentino acusado de abusar de sus hijas usó aberrante argumento
El sujeto fue condenado a 50 años de cárcel por los hechos hacia cuatro de sus seis hijas. Si bien su defensa apeló al fallo porque contenía "pruebas falsas, contaminadas y subjetivas", el tribunal optó por ratificar la condena.
Viernes 14 de octubre de 2022 | 19:55
Impacto ha causado en Argentina el caso de un empresario que fue condenado por abusar sexualmente de sus hijas y quien usó un insólito argumento para apelar al fallo.
Se trata de Alejandro Rosario Manuel Leguizamón, condenado a 50 años de cárcel por abuso sexual en contra de cuatro de sus seis hijas.
Si bien el imputado había decidido apelar, argumentando que "no es abuso, es incesto", la Sala III del Tribunal de Casación Penal de Buenos Aires rechazó la acción judicial y optó por ratificar la sentencia, consignaron medios trasandinos.
De acuerdo a lo informado por la prensa local, el tribunal decidió confirmar la sentencia hacia Leguizamón, luego de que su defensa pidiera que fuera revisada porque contenía, a su juicio, la acusación contenía "pruebas falsas, contaminadas y subjetivas".
En tanto, los jueces Víctor Horacio Violini y Ricardo Borinsky explicaron que "El testimonio brindado por las víctimas resulta medular para acreditar los extremos del hecho, toda vez que los mismos suelen tener lugar en un ámbito de intimidad, en el que resulta inusual la presencia de testigos, a través de cuya declaración pueda reforzarse la prueba reunida".
"Sin perjuicio del evidente ataque a la integridad sexual de las víctimas, la mecánica para su concreción incluyó un permanente sometimiento violento, que incluía golpes y humillaciones, circunstancia que aumentó la gravedad de los sucesos padecidos por las víctimas", detalló el Tribunal.
"No es abuso, es incesto"
Los abusos habrían comenzado cuando las hijas eran pequeñas. La primera denunciante fue Romina y comentó que la primera vez que su padre abusó de ella tenía solo 5 años y la amenazaba si decía algo.
Según se informó, los hechos ocurrieron al interior de la casa familiar, ubicada en la zona de Castelar sur, además de otros lugares que frecuentaban juntos.
"Lo mío con vos no es abuso, es incesto. Yo estoy enamorado de vos y juntos tenemos que hablar con tu mamá para que ella haga una terapia y lo acepte", le dijo el hombre en 2016 en una carta. Tras eso, la joven lo denunció.
Además, contó que su madre estaba "ausente" durante el tiempo que fueron abusadas, tanto ella como sus hermanas y que golpeaba a sus hijos hombres y a su madre.
Tras los desgarradores de sus hijas y la evidencia en su contra, Alejandro Leguizamón rechazó la denuncia y se limitó a afirmar que "alguna vez se me fue la mano".