Sociólogo advierte que recién "hacia el 2024 las tendencias de la pandemia se habrán revertido"

El origen de la pandemia que se conoce hasta ahora se remonta al 2019 en Wuhan, China. Y ya en el 2021, se observan los primeros pasos que darían luces sobre el posible término de la emergencia sanitaria con la elaboración de vacunas y posterior inoculación de la población.

Sin embargo, las consecuencias del COVID-19 se percibirán durante varios años, tal como ha ocurrido con otras pandemias que han afectado a la raza humana. Y así lo explica Nicholas Christakis, co-director del Instituto de Ciencias de las Conexiones en la Universidad de Yale, en su libro La flecha de Apolo: el impacto profundo y duradero del coronavirus en nuestro modo de vida.

"Las plagas no son algo nuevo para nuestra especie", declaró Christakis en The Guardian, pero "nosotros somos la primera generación de humanos vivos que enfrentaron esta amenaza y pudieron responder en tiempo real con medicinas eficaces. Es un milagro", explicó.

"Una vez que terminan las pandemias, suele seguir un periodo en el cual la gente busca mucha interacción social", estimó. Esto debido a que "durante las epidemias hay aumentos en la religiosidad, la gente se vuelve más abstemia, ahorra dinero, elude los riesgos. Hoy estamos viendo todo eso, como hemos visto durante cientos de años de epidemias".

Otro de los desafíos a enfrentar este 2021 es la información falsa en torno a las vacunas contra el COVID-19 y que afectaría al efecto rebaño que se quiere lograr en la población. Al respecto, Christakis declaró a NPR que "la negación y las mentiras sobre lo que sucede es en sí mismo casi una parte intrínseca de una pandemia".

Producto de lo anterior, y de lo desconocido que sigue siendo este virus en cuanto a su comportamiento, el uso de mascarillas y distancia social -entre otras medidas sanitarias- deberán mantenerse hasta al menos el 2022. Posterior a ello, afirmó Christakis, "entraremos a un segundo periodo, cuando nos recuperemos del golpe psicológico, social y económico del virus. Así ha sido durante siglos con otras epidemias: nos llevará un par de años reconstruir nuestra economía y recuperarnos", estimando este ciclo hasta el 2023, indicó a PBS.

"La vida lentamente comenzará a volver a la normalidad, con algunos cambios persistentes", agregando que "hacia 2024 las tendencias de la pandemia se habrán revertido. La gente va a buscar interacción social sin pausa. Eso podría incluir sexo licencioso, mucho gasto y una retracción de la religiosidad", señaló el sociólogo y escritor.

Nicholas Christakis aborda este tema en específico en otro libro denominado Connected, donde analiza la cicatriz que dejan las pandemias en la sociedad y que se relacionan con "un momento de duelo: no sólo por la pérdida de personas que conocemos, que murieron, o por la pérdida de nuestra salud, sino también por la pérdida de una forma de vida", consignó NPR.

"Nos aflige no poder comer con nuestros amigos, no poder ir al cine. Y tenemos que aceptar esa realidad desagradable", agregó.

"Si la historia sirve de guía, tendremos un par de años para recuperarnos del shock. La economía no va a volver de inmediato: la gente no va a salir de pronto a los restaurantes y los aeropuertos. Creo que desde 2024 tendremos una suerte de periodo post pandemia. Y en 10 años la sociedad habrá vuelto mayormente a la normalidad, aunque habrá algunos impactos duraderos, en varios frentes, incluidas cosas como el teletrabajo o la marca económica", enfatizó el autor.

El regreso a la "normalidad" previa a la pandemia, será dada gracias a las cualidades innatas del ser humano. Así lo planteó Christakis, quien dijo que "no ignoro los horrores que los seres humanos se pueden infligir entre sí, pero veo lo bueno en la gente. Tenemos muchas cualidades maravillosas que son muy raras en el reino animal. Entre ellas la capacidad de amar, la amistad, la capacidad de cooperar, hacer sacrificios para el beneficio de desconocidos, enseñar y aprender entre nosotros. Evolucionamos para hacer estas cosas", destacó Christakis.

"Mediante la diseminación de ideas vamos a derrotar al germen. Es precisamente porque podemos trabajar juntos, cooperar, intercambiar información. Estas herramientas son las que nos permitirán la victoria sobre el virus", sentenció al respecto.