320 kilos de gato: Apolo, el cruce entre tigresa y león que se volvió viral por su impresionante tamaño

Se llaman ligres y son el cruce entre león y una tigresa. Uno de sus más recientes exponentes se ha hecho viral por su gigantesco tamaño, haciendo recordar a una extinta especie prehistórica que dominó sus territorio.

Hablamos de Apolo, el felino hijo de Ivory Marfil, un león blanco africano, y Saraswati, una tigresa de Bengala blanca, quien pesa 320 kilos y nació en diciembre de 2013 y mide casi 3 metros de largo.

Actualmente el animal vive en el Safari Myrtle Beach, en Carolina del Sur con sus entrenadores Mike Holston y Kody Antl, quienes han subido videos y fotos con el gigantesco gato.

Es por esto que algunos han recordado a los "dientes de sable", término que se una para hablar de gran variedad de felinos que pisaron la tierra en diversos momentos de la historia, como el Smilodon, Hoplophoneu, Homotherium, Thylacosmilus, Metailurus, Machairodus, Megantereon, entre otros.

Lo curioso es que cuando nació, Apolo era el más pequeño de la camada de sus otros tres hermanos llamados Yety, Odlin y Sampson. Situación que quedó atrás ya que superó a todos. Excepto a su tío Hércules, quien pesa más de 400 kilos y mide 3,35 metros, y el más grande del mundo, de los que se tiene registro.

El felino que en los videos se comporta como un gato de casa, pero versión XL, consume alrededor de 10 kilos de carne de vaca o de pollo diarios.

Los ligres y tigones (cruce tigre con leona) no suelen darse en la naturaleza, ya que si especies que no comparten hábitat y suele ser productos de cautiverios o refugios. El primero de los que se tiene registro fue en India en el siglo XIX.

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El doctor Bhagvan del refugio T.I.G.E.R.S. (The Institute of Greatly Endangered and Rare Species) fue el encargado de que la pareja de felinos se uniera y diera a luz a los 4 ligres, únicos en el mundo por ser albinos.

Sin embargo, no todo es positivo. Animalistas especulan con que su gran tamaño se debe a alteraciones congénitas o por una malformación. Además, critican la situación, ya que el parto puede poner en peligro la vida de las hembras gestantes.