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Baila Pikachu es mamá, tía del furgón y reclama por los bajos sueldos en Chile: "Quiero algo mejor para mis hijos"

Más que en un viral, su alegre protesta se ha convertido en un movimiento que partió con una caída, pero que ahora motiva muchos a levantarse y salir a la calle. En conversación con CHV Noticias, la madre de 4 hijos reveló por qué usa ese traje y le pidió a Piñera que se dé cuenta de lo que la ciudadanía pide: "la gente necesita que le suban el sueldo, la gente vive endeudada".

Martes 29 de octubre de 2019 | 14:56

Las manifestaciones sociales en Santiago han dejado de todo, desde miles de creativas pancartas hasta alienígenas en Plaza Italia, pero en la histórica manifestación del viernes 25 de octubre un corpóreo gigante y amarillo logró representar el espíritu de la marcha.

"Baila Pikachu, baila Pikachu" fue el grito de la gente al ver al amigable Pokémon avanzando con ritmo alegre y contagioso por la Alameda. Eso hasta que se cayó.

Hubo risas, se levantó y siguió como si nada. Todo era una anécdota, pero lo grabaron.

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Internet hizo lo suyo: ese video comenzó a ser compartido sin control y hoy ya supera 1,2 millones de reproducciones en Twitter. Todavía hay gente que no lo supera:

Ahora es el personaje que todos quieren ver en la protesta. Para tranquilidad de muchos, Pikachu no ha dejado de protestar y la persona tras el disfraz conversó CHV Noticias sobre sus motivaciones y sus demandas.

¿Quién es y de dónde salió el Pikachu?

Bajo la piel del tipo eléctrico está Giovanna Grandon (44), mamá de cuatro y actualmente tía del furgón del colegio Jesús Servidor de Peñalolén. Ya la ubican en el barrio: hace siete años que lo conduce.

Asegura que todo comenzó como una mera coincidencia, luego de que uno de sus hijos comprara cosas chinas. Cuando llegaron los productos, se dieron cuenta que venía un disfraz de Pikachu. ¿Para qué? Simplemente Halloween.

Sin embargo, cuando se venía una de las grandes convocatorias, Giovanna fue a marchar, pero se acordó de que tenían ese traje y se devolvió a buscarlo “para bailar y que sea más entrete la cosa”.

“Nunca pensé lo que iba a generar, pero me parece lindo”, comentó sobre todo lo que ha aparecido en redes sociales y el verdadero fenómeno que creó.

Hay un mundo por salvar

Pikachu tiene una misión dentro de las manifestaciones. Como explica Giovanna, se pone el disfraz en las protestas “para aportar al bien común y tratar de dar un mensaje de apoyo, de que nos juntemos como personas, de que haya más empatía con el resto”.

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Y pese a que en más de una foto en su traje aparece adherida la consigna #RenunciaPiñera, Giovanna aclara que eso se lo pegó alguien más y cree que aún hay tiempo para el diálogo.

“El caballero (Sebastián Piñera) tiene que arreglar lo que está pasando. Si él quiere seguir igual, la gente no quiere eso. Que se ponga la mano en el corazón y que se dé cuenta que lo que la gente necesita. Necesita que le suban el sueldo, la gente vive endeudada”, afirmó.

“Yo era pobre, no tenía nada. A base de esfuerzo con mi marido logramos salir adelante (…) quiero algo mejor para mis hijos, quiero que esto se arregle. Que todo esto sirva para algo”, enfatizó.

Esta esforzada mujer quiere seguir asistiendo a las movilizaciones, pero muchas veces no puede a todas ya que debe seguir con su trabajo. Su familia la ayuda con las redes sociales, donde ha recibido miles de mensajes de apoyo. “Me alegran el día y llenan el corazón de amor”, asegura.

Como mensaje final, afirmó: “Quiero aportar en algo positivo. Que las marchas sean pacíficas, familiares y que los carabineros no repriman”.

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¿Y la caída?

Todos se ríen, pero nadie sabe lo complicado que es usar el traje. Según contó, no le queda mucho espacio para caminar y eso la desestabilizó.

“Yo me había puesto recién el traje. Este llega a la mitad de la pantorrilla, por lo que es difícil caminar”. Afortunadamente, no tuvo lesiones y pudo continuar animando a la gente.

“Cuando subieron el primer video me dio vergüenza, pero ahora me río. Lo veo más de 50 veces”, contó la mujer que tiempo atrás, se desempeñó durante 15 años como tía de un jardín de la Fundación Integra. “Dentro de tantas cosas malas que han pasado, esto es algo para rescatar”, agregó.

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