Enérgico rechazo a toma feminista en la U. de Chile por parte del decanato: "Es incomprensible una acción como esta"
Manuel Amaya, decano de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, hizo un llamado al diálogo y a "evitar la imposición minoritaria en un espacio que es esencialmente plural, tolerante y democrático, que no logra aportar ni al objetivo del movimiento ni al cumplimiento de nuestros objetivos institucionales".
Jueves 7 de marzo de 2019 | 13:51
Sillas apostadas para impedir el acceso y lienzo que rezan consignas tales como "En toma feminista 8M" y "8 de marzo, la huelga va". Así amaneció uno de los frontis de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo (FAU) de la U. de Chile en la previa del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, el cual se desarrollará en Chile y el mundo durante este viernes 8 de marzo.
La ocupación ocurre a propósito del llamado a huelga general que la Coordinadora 8M y el movimiento feminista chileno han organizado para dicha jornada. Por ello, un grupo de estudiantes decidió tomarse parte del campus Andrés Bello, en pleno centro de Santiago, con el fin de apoyar la manifestación.
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No obstante, el decano de la facultad, Manuel Amaya, manifestó su más enérgico rechazo a lo que él llamó como "una acción de violencia que ha impedido el día de hoy el desarrollo normal de nuestra vida universitaria".
A través de una declaración pública en el sitio de la FAU, la autoridad subrayó que "nuestra comunidad está realizando enormes esfuerzos por mejorar la gestión estudiantil hacia la equidad y la integración, permitiendo espacios de diálogo permanentes" y que, por lo mismo, "es incomprensible una acción como esta, considerando que la movilización estudiantil y la reivindicación feminista, que respaldamos institucionalmente como facultad y universidad, son absolutamente compatibles con la vida académica".
Asimismo, lamentó los inconvenientes que la acción ha generado en actividades académicas programadas con anticipación y aseveró que las manifestantes que lideran esta acción "no miden las consecuencias humanas, sociales y económicas que implican".
Por último, Amaya hizo un llamado al diálogo "para evitar la imposición minoritaria en un espacio que es esencialmente plural, tolerante y democrático, que no logra aportar ni al objetivo del movimiento ni al cumplimiento de nuestros objetivos institucionales".