"Era enredado": El raro cuento de Kafka que complicó a los estudiantes en la PSU de Lenguaje
Un curioso texto del escritor checo Franz Kafka fue uno de los ítems más comentados por los jóvenes que rindieron la prueba este lunes. "Hacía que uno se confundiera, porque no había nombres, nada", comentó una estudiante a Las Últimas Noticias.
Martes 7 de enero de 2020 | 07:44
Una serie de incidentes marcaron el primer día de rendición de la Prueba de Selección Universitaria (PSU). Cerca de 42 mil personas no lograron dar su prueba y se suspendió la evaluación en 86 recintos a lo largo del país, luego que se registraran protestas en estas sedes.
Por otra parte, quienes lograron rendir el test también se vieron complicados, aunque por una pregunta en especial incluida en el ítem de Comprensión Lectora.
Lee también: Estudiantes secundarios anuncian que este martes continúan manifestaciones contra la PSUSe trata de un cuento de Franz Kafka llamado "Una confusión cotidiana", donde se relata la historia de dos personajes cuyo nombre solo consta de una letra.
Según comentó a Las Últimas Noticias una estudiante del liceo Augusto D'Halmar de Ñuñoa, Antonia Lizana, el texto "hacía que uno se confundiera, porque no había nombres, nada". Asimismo, Alan Murúa, del liceo Paulina Von Mallinckrodt de Providencia, indicó que "era enredado, tenías que hacer como una relación matemática".
"Hice una recta, traté de entrelazar cosas y como que relacioné todo y me lo imaginé y ahí se me hizo un poco más simple", aseguró el joven.
Este curioso cuento no pertenece a ninguno de los libros del escritor checo, sino que es parte de sus "Escritos Póstumos" que fueron publicados en sus "Obras Completas".
"Lo escribió en la segunda quincena de octubre de 1917 en Zürau, poco después de que le fue diagnosticada la tuberculosis de la cual moriría en 1924. Zürau es una localidad al noroeste de Praga donde se recluyó por unos meses en busca de buen tiempo", detalla en el matutino el académico Roberto Chacana, de la Facultad de Filosofía de la U. Austral.
A continuación, el cuento completo "Una confusión cotidiana" de Franz Kafka:
Un incidente cotidiano, del que resulta una confusión cotidiana. A tiene que cerrar un negocio con B en H. Se traslada a H para una entrevista preliminar, pone diez minutos en ir y diez en volver, y se jacta en su casa de esa velocidad. Al otro día vuelve a H, esta vez para cerrar el negocio. Como probablemente eso le exigirá muchas horas, A sale muy temprano. Aunque las circunstancias (al menos en opinión de A) son precisamente las de la víspera, tarda diez horas esta vez en llegar a H. Llega al atardecer, rendido. Le comunican que B, inquieto por su demora, ha partido hace poco para el pueblo de A y que deben haberse cruzado en el camino. Le aconsejan que espere. A, sin embargo, impaciente por el negocio, se va inmediatamente y vuelve a su casa.
Esta vez, sin poner mayor atención, hace el viaje en un momento. En su casa le dicen que B llegó muy temprano, inmediatamente después de la salida de A, y que hasta se cruzó con A en el umbral y quiso recordarle el negocio, pero que A le respondió que no tenía tiempo y que debía salir en seguida.
A pesar de esa incomprensible conducta, B entró en la casa a esperar su vuelta. Y ya había preguntado muchas veces si no había regresado aún, pero seguía esperándolo siempre en el cuarto de A. Feliz de hablar con B y de explicarle todo lo sucedido, A corre escaleras arriba. Casi al llegar tropieza, se tuerce un tendón y a punto de perder el sentido, incapaz de gritar, gimiendo en la oscuridad, oye a B -tal vez muy lejos ya, tal vez a su lado- que baja la escalera furioso y que se pierde para siempre.