Fue al hospital por una simple tos, pero cayó en coma y le amputaron sus extremidades para salvarla

Una ex enfermera de 51 años estuvo al borde de la muerte luego que la ingresaran a un hospital por una tos. Sin embargo, cayó en coma y le tuvieron que amputar las dos piernas, el brazo izquierdo y cuatro dedos de la mano derecha por una sepsis.

Jayne Carpenter, de Reino Unido, decidió compartir su historia el pasado 13 de septiembre en el marco del Día Mundial de la Sepsis.

Según consigna Mirror, la vida de la mujer cambió en 2016. Recuerda que fue a un hospital por una tos que la aquejaba y porque la flema era de color oscuro.

Si bien pensaba que sólo era un virus, su médico la aconsejó que fuera urgencias.

Una vez que la examinaron, no lograron dar con un diagnóstico, porque pensaban que era una neumonía, pero su estado de salud comenzó a deteriorarse y entró en coma.

Estuvo por nueve semanas luchando por su vida, hasta que a su esposo, Rob, los médicos les señalaron que Jayne moriría si no le amputaban sus extremidades.

Estos tres años, contó, han sido enfocados netamente en la recuperación. Pese a que en un comienzo le dijo a su marido que era libre de irse, él ha estado con ella hasta el día de hoy para ayudarla.

“Tratamos de vivir la vida lo más normal posible, pero no siempre es lo mismo que antes”, dijo Jayne.

Además, sostiene que “divido mi vida en dos partes: antes y después de tener sepsis”.