Niño falleció luego de que compañero le arrojara queso a la cara
Una reacción alérgica fatal y "extraordinariamente inusual", provocó su muerte. Su caso abrió la discusión acerca de los protocolos para enfrentar casos de alergia en establecimientos educacionales.
Sábado 11 de mayo de 2019 | 20:21
Sin pensar que sería algo amenazante, tan solo un juego, entre compañeros solo fue un acto inocente. Mucho menos pensar que un queso sería tan letal, y que, probablemente, algo entre risas, terminara de esa forma.
El hecho ocurrió el 28 de junio de 2017, en una escuela al oeste de Londres. El afectado, un menor de 13 años: Karanbir Cheema, quien extrañamente falleció luego de una voraz reacción alérgica.
Según, Adam Fox, un pediatra especialista en alergias del Hospital de Niños Evelina de Londres, calificó la situación de "extraordinariamente inusual".
"No tenía conocimiento de ningún otro caso fatal", dijo Fox, quien además declaró en tribunales donde se llevó a cabo la investigación del caso.
Estas reacciones alérgicas severas son muy poco frecuentes según el especialista.
Diagnósticos desconocidos en colegios
Karanbir Cheema sufría de alergias al trigo, huevo, leche, nueces de árbol y gluten.
Cuando ocurrió el accidente, el menor corrió desesperadamente por la habitación. No podía respirar.
En su escuela casi inmediatamente después del episodio, sin embargo, la atención "fue inadecuada", según la médico forense Mary Hassell, quien también fue parte de la investigación.
Una de las agravantes que consideró Hassell fue que el plan de acción contra la alergia no estaba en la caja médica ni en el procedimiento que debía seguir la escuela William Perkin.
Le habrían admnistrado EpiPen, remedio que contenía adrenalina para contrarrestar los efectos de la alergia, pero que sin embargo, estaba vencida en un año. De haber estado vigente, se pudo haber salvado la vida de Cheema.
Este particular hecho puso sobre la mesa el conocimiento que deben tener las escuelas con cada diagnóstico alérgico, en el que se considera alimentación y elementos a los que no pueden ser expuestos estos casos.
La madre del menor, Rina Cheema, tras casi dos años del fallecimiento de su hijo, espera que las escuelas y las autoridades estén más conscientes de las alergias que afectan a sus estudiantes.
"Mi hijo era consciente, él mismo sabía lo rápido que debía reaccionar. sus palabras en la escuela fueron: 'Por favor, ayúdenme o voy a morir", recordó su madre a BBC Mundo.
Por su parte, Alice Hudson, la directora ejecutiva de Twyford Trust, ente que administra la escuela donde estudiaba Cheema, dijo que "hubo una muy buena conciencia general sobre sus alergias en relación con el pan y el queso".