La presidenta del Senado salió al paso de los cuestionamientos luego de asistir a la cita con el Gobierno que concluyó en “una agenda de mínimos comunes” para que “lleguen recursos de manera universal”. "Nadie que aprecie la democracia, nadie que quiera contribuir a la solución de los problemas más urgentes que tiene la ciudadanía puede restarse de un proceso de diálogo, eso no es cocina, es democracia", dijo.