Talca: Inventó secuestro pero estaba comiendo cazuela en night club tras pasar dos días en el local
No estaba secuestrado, andaba de parranda. Esa frase bien podría resumir la historia de un sujeto que gastó $15 millones en "consumos" e inventó el episodio porque "no quería regresar a su hogar".
Jueves 21 de noviembre de 2024 | 10:50
Un insólito episodio tuvo lugar el pasado fin de semana en Talca, región del Maule, donde un hombre fingió un secuestro cuando en realidad había pasado dos días al interior de un night club.
Fue el medio local Radio FMMás el cual reveló el inaudito suceso, mismo que fue descubierto por funcionarios de Carabineros mientras investigaban el supuesto rapto.
En concreto, informó el sitio, los uniformados llegaron hasta el local nocturno "Herencia de Papá" con el fin de indagar en la denuncia interpuesta por la pareja del "afectado".
Sobre esto último, el individuo habría señalado que fue retenido contra su voluntad por cerca de dos días, señalando también que fue víctima de un robo de $15 millones de pesos.
Ver también: VIDEO | Graban a Cathy Barriga bailando zumba con reclusas de la cárcel de San Miguel
Hombre era "cliente frecuente" del night club
Sin embargo, la mentira no duró mucho, pues personal de la institución policial constató que el falso secuestrado estuvo de fiesta por casi 48 horas en el recinto.
En este último, los propios trabajadores señalaron que era un cliente habitual y que gastó la milllonaria suma de dinero antes mencionada en consumos, todo esto respaldado con boletas legales.
"Está acá, tranquilo, comiéndose una cazuela"
"Este joven es cliente habitual. Llegó con dramas con la señora, carreteó dos días, se fue al hotel, volvió, siguió carreteando, pagó todo y después apareció la señora con esta historia del secuestro", explicó uno de los administradores del night club a la radio citada.
Ver también: “Qué terrible”: Graban a hombre apagando una parrilla en pleno mar de playa de Iquique
Pero eso no es todo, pues mientras se investigaba la desaparición, un amigo llamó a las dependencias del recinto y la mentira se desmoronó al recibir una insólita respuesta.
“Está acá, tranquilo, comiéndose una cazuela. No está curado ni nada. Solo está evitando llegar a la casa", le dijeron desde el local, descartando así el presunto secuestro.