Mauricio Pinilla cuenta que su hija lo retó: "Papito, ¿por qué estás tan agresivo con ese niño de Twitter?"
"Me gusta harto el juego de las redes sociales", confesó el futbolista chileno. Ante esto, reveló un episodio que tuvo con su hija ante una pelea en Twitter, plataforma que considera como "una jungla".
Sábado 12 de diciembre de 2020 | 15:52
No es una sorpresa que las redes sociales fueron el boom de la pandemia. Las distintas plataformas fueron ganando más adeptos durante los meses de cuarentena. Uno de ellos fue el delantero hoy en Coquimbo Unido, Mauricio Pinilla.
En conversación con Francisco Saavedra a través Tinto de Verano, su programa transmitido por Instagram, el ex jugador de la Universidad de Chile reveló que "me gusta harto el juego de las redes sociales".
“Twitter es una jungla. En Instagram uno puede hacer como más lazos con la gente. En Twitter uno va y te tiran el bombardazo, es difícil llegar a un lugar de debate interesante, porque hay mucho weón que anda puteando. En Instagram uno puede interactuar mucho más con la gente”, dijo el actual jugador de Coquimbo Unido.
Ante esto, Saavedra le preguntó si ha discutido por Twitter y Pinilla respondió: "sí, yo no tengo problema". Aún así "trato de hacerlo con argumentos".
El atacante comentó que "la gente puede tener su opinión, pero si lo hace con respeto y después se empiezan a tirar chuchadas para arriba y para abajo. Ahí se termina la conversación. Borro y chao".
Del mismo modo, contó que "si alguien me hace una crítica constructiva, yo comparto, converso, trato de responder. Hay mucha gente que ha cambiado su opinión por no conocerme y el ir interactuar en redes sociales, uno tiene la posibilidad de darse a conocer de la forma real que uno es”.
Finalmente, Pinilla dijo que siempre trata de cuidar a su familia a pesar de que están expuestos públicamente.
De hecho, "el otro día le respondí a uno, ‘saco de wea’ le dije a uno. Y llegó mi hija y me dice ‘papito, ¿por qué estás tan agresivo con ese niño de Twitter?’. Y yo ahí, ‘no hija, perdón, lo borro’. Entonces los niños están grandes, mi hija va a cumplir 15 años, ya va a querer traer pololo a la casa”, contó.