En el segundo juicio que el chileno enfrentó en Francia, el tribunal nuevamente ratificó su culpabilidad en la desaparición y muerte de la joven japonesa. Un proceso legal que estuvo marcado, entre otras cosas, por nuevos testimonios y pistas.
Nicolás Zepeda fue
declarado culpable por el crimen de
Narumi Kurosaki en el
cierre del segundo juicio que se desarrolló en Francia, luego de que su defensa apelara al primero tras alegar su supuesta inocencia.
Tras algunas horas de deliberación, durante este jueves, el jurado francés determinó que el
chileno es culpable de la desaparición y muerte de la joven japonesa en diciembre de 2016.
¿A cuántos años de cárcel fue condenado?
De esa manera, el tribunal determinó que el chileno fuese
sentenciado a 28 años de cárcel.
Según informó el periodista Roberto Cox a
Contigo en la Mañana, se confirma que se
acogió la figura de premeditación en la condena. Es decir, él planeó el asesinato de la joven antes de acudir a Francia.
Por otro lado, se prevé que el
chileno recién a los 14 años podría optar a beneficios carcelarios que le permitan acortar su estancia en la prisión.
Segundo juicio contra Zepeda
Tal como mencionamos, éste corresponde al
segundo juicio que enfrentó Nicolás Zepeda por la desaparición de Narumi Kurosaki en diciembre de 2016.
La primera vez, al igual que en esta ocasión,
también fue sentenciado a 28 años de cárcel por el asesinato de la joven. Sin embargo, mediante una apelación presentada por su defensa, el proceso legal se debió desarrollar nuevamente y así dio paso al hallazgo de nuevos antecedentes.
En esta segunda oportunidad, el juicio duró cerca de tres semanas y
prestaron declaración las hermanas de Narumi, su madre Taeko Kurosaki, amigas de la víctima, psiquiatras y el mismo Zepeda.
Una de las revelaciones más impactantes fue que
Nicolás Zepeda admitió haber mentido en el primer juicio y confesó que viajó a Francia para ver a Narumi. Asimismo, reiteró su inocencia y acusó haber sufrido vejaciones durante su paso por la cárcel en Francia.
A pesar de ello, y con las pruebas contundentes presentadas por la Fiscalía y los abogados querellantes -representando a la familia de Kurosaki y Arthur Del Piccolo-, finalmente
se ratificó su culpabilidad.