La compañía detalló al Sindicato de Tripulantes de Cabina LATAM (STCLA) que la determinación "se realizaría por 3 meses (abril, mayo y junio) y podría ser extensible" y que "no contempla la devolución de los dineros no pagados durante este período".
A través de un comunicado dirigido a todos los trabajadores, la directiva del Sindicato de Tripulantes de Cabina LATAM (STCLA) informó de las medidas propuestas por la empresa para que asegurar su sostenibilidad a raíz de la incertidumbre en la economía mundial por el brote del coronavirus.
Según les comentaron las autoridades de la aerolínea en una reunión realizada ayer, actualmente "la operación internacional disminuye en un 90% y la ruta nacional en un 60%, pudiendo detenerse en un 100% la operación la próxima semana".
De este modo, indican que los ejecutivos les comunicaron que "la única alternativa para apuntar a la sustentabilidad de la compañía, hacer la caja necesaria para enfrentar este período que se avecina y mantener la fuente laboral de los 43.000 trabajadores" es "aplicar una reducción del 50% al sueldo base y 50% al piso de hora de vuelo".
En el texto se detalla que dicha reducción "se realizaría por 3 meses (abril, mayo y junio) y podría ser extensible, previa revisión una vez terminado este período" mientras que "no contempla la devolución de los dineros no pagados durante este período".
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La empresa compromete un piso de sueldo bruto de 750.000 y la reducción se materializaría a través de anexos a los contratos individuales de trabajo.
"Esta es una medida transversal a todos los empleados de la compañía, a todas sus filiales que apunta a salvar a LATAM con el fin de evitar despidos masivos, los que incluso podrían llegar a ser sin indemnización", detalla la directiva.
"Estamos conscientes que estas medidas impactarán profundamente a todas nuestras familias, sin embargo, esta es la decisión que tomó la compañía para salvaguardar de alguna manera nuestra fuente laboral", cierran.
Las determinaciones se conocen luego de que el próximo CEO de la empresa, Roberto Alvo, pidiera ayuda al gobierno ante la crisis al asegurar en conversación con CNN Chile que esta “es la crisis más grande que ha habido en la industria aérea mundial”.
El ministro de Economía, Lucas Palacios, descartó lo anterior y manifestó que "vamos a priorizar siempre a las personas que más lo necesitan y no me parece conveniente que grandes empresas salgan por la televisión a pedir estas ayudas de parte del Estado. Eso se puede realizar desde otro punto de vista".
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