La
PDI logró liberar a dos hombres, de nacionalidad venezolana, que habían sido secuestrados en Renca, y más tarde llevados a un
predio de Paine para su cautiverio. Para su libertad los captores exigieron a las familias el
pago de $50 mil dólares, una negociación que fue liderada por las fuerzas policiales, quienes lograron la
liberación de uno de los hombres. Tras varias investigaciones por parte de las autoridades,
fue posible dar con el paradero del segundo secuestrado, que estaba bajo la custodia de otro hombre venezolano.