Robaron más de 800 millones de pesos desde comienzos del año 2024 con una fórmula muy sencilla: sobornaron a un guardia de una empresa de telefonía móvil y este trabajador les indicaba qué sucursales atacar, a qué hora y dónde habían más artículos de alto valor comercial. Así cometieron a lo menos 7 delitos de las mismas características, en los que también pagaron a carabineros activos por información privilegiada del tiempo que tenían para concretar su millonarios saqueos.