Sebastián Vanella salió al paso de las denuncias por maltrato físico y psicológico realizadas por trabajadores de distintas sucursales de la cadena de comida y afirmó que están abriendo nuevos canales de comunicación con sus empleados.
En plena crisis se encuentra la conocida cadena de restaurantes La Piccola Italia, luego que se dieran a conocer una serie de denuncias realizadas por los trabajadores de sus sucursales que dan cuenta de actos de maltrato laboral y físico, además de incumplimiento en la entrega de pagos y finiquitos.
"Han pasado tan pocos días y hemos estado en todo este revuelo. He recibido mensajes apoyo de nuestros trabajadores porque estamos todos realmente afectados", comentó el gerente general de La Piccola Italia, Sebastián Vanella, en conversación con La Mañana de Chilevisión donde se refirió a los casos de abuso, varios de los cuales fueron registrados por los empleados.
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Una de estas denuncias corresponde a la realizada contra David Plaza, jefe de cocina de la sucursal de Paine conocido como el "Tyson" y que grabado agrediendo verbalmente a quienes tenía a su cargo.
Sobre este caso, Vanella señaló que no tenía conocimiento de la orden de alejamiento y denuncias de violencia intrafamiliar interpuestas por la ex pareja de Plaza. "No es política de nuestra empresa el maltrato ni el acoso de las personas. La verdad es que yo de los 1.500 colaboradores que tenemos en la empresa, no estoy enterado de las cosas personales", recalcó.
El gerente remarcó que "todas las personas que estén involucradas en algún video que veamos van a estar desvinculados. Están todos desvinculados, no solamente él (Plaza). Todas las personas que tengan abuso de su poder las vamos a desvincular".
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Respecto a la acusación contra José Navarrete, supervisor de garzones, por supuesto acoso sexual a una de las funcionarias, Vanella indicó que no sabía del caso: "No hay una denuncia en Mutual o en Carabineros donde nosotros nos podríamos haber enterado y haber hecho algo en ese momento, respecto a ella o cualquier caso que podría haber ocurrido".
Frente a estos casos, el dueño de La Piccola Italia reconoció que están abriendo nuevos canales para comunicarse con los trabajadores: "Estamos poniendo unos buzones en cada local, un mail y un sistema que vamos a crear con una aplicación, para que los trabajadores hagan llegar todas las sugerencias y sus reclamos, y que estos lleguen directo a mí para que, de esta forma, yo esté más conectado con ellos".
Por otra parte, desmintió que el restaurante no pague las horas extras, tal como lo indicaron algunos empleados que llegaban a trabajar 53 horas durante 4 días.
"Se pagan las horas extras. Los horarios largos de los que hablan son turnos cortados, que es legal. Puede que hayan estado 10 horas en el local, pero no seguidas", sostuvo Varella, aprovechando también de negar el supuesto reciclaje de comida en los locales. "Eso es totalmente falso. Eso puede tener toda la ciudadanía la tranquilidad. La Piccola Italia se preocupa de su producto y su calidad".