Teo, el nombre del perrito, se encontraba en la mesa, quieto y listo para ser atendido, y, sin razón alguna, el profesional le propino golpes en el cuello.
Fue tal el nivel del golpe propinado por el médico veterinario que el perro quedó con secuelas, por lo que el dueño debió recurrir a otro especialista y decidió que se iniciara una investigación, la que develó el origen de todo.
De acuerdo a lo que se aprecia en las cámaras de seguridad, el shih tzu víctima de la agresión recibió un duro golpe sin razón alguna mientras era atendido en la clínica El Country de Barranquilla, Colombia, por el profesional.
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Teo, el nombre del perrito, se encontraba en la mesa, quieto y listo para ser atendido. El trabajador se sienta frente al pequeño, lo coge y le sujeta la cara.
Hasta ahí todo bien y parecía seguir el procedimiento habitual, sin embargo, de repente, le propina un golpe en el cuello con las dos manos que dejó a Teo inconsciente.
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Sólo en ese momento, en que el animal no reaccionaba, el hombre intenta reanimarlo. Pero al no suceder nada, entra en desesperación y recurre a sus compañeros.
Al pasar los minutos, el perro logró despertar y fue devuelto a su dueño como si nada hubiese ocurrido.
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Sin embargo, el dueño dijo, según consigna PlayGround, que Teo vomitó, se encontraba con la mirada perdida, se quedaba quieto y babeaba constantemente, algo que no hacía antes.
Alertado por esto, lo llevó a otra veterinaria donde le preguntaron si el perro había sufrido algún golpe.
Ya con la evidencia médica, el hombre exigió que se hiciera la investigación correspondiente en la veterinaria, por lo que se debieron revisar las cámaras de seguridad y entregar la evidencia.
12/02/2019
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