Un grupo de adultos habría agredido a tres niños mientras celebraban Halloween. Los sujetos fueron detenidos, pero quedaron en libertad tras pasar la noche en comisaría.
Un insólito ataque tuvo lugar la noche de Halloween, el 31 de octubre, en San Antonio, Región de Valparaíso, donde tres menores de edad fueron agredidos en dos ocasiones presuntamente por adultos.
Los acusados fueron detenidos brevemente, pero quedaron en libertad tras pasar la noche en comisaría, lo que desató indignación entre los familiares de las víctimas.
Los víctimas tienen 12, 13 y 15 años. El ataque inicial ocurrió entre las 21:00 y 22:00 horas cuando dos de los menores estaban en una plaza de la comuna.
Allí, según informó El Líder de San Antonio, un grupo de tres hombres y una mujer descendieron de un vehículo para agredir a los niños.
Según el testimonio del padre de uno de ellos, el conductor del automóvil habría golpeado a uno de los menores con una botella, causándole una herida en la cabeza.
Los agresores habrían acusado a los niños de haber lanzado huevos a una casa, lo cual los familiares aseguran es falso.
En medio de la agresión, otro de los adultos vació una cerveza sobre uno de los menores y lo obligó a llamar a su madre bajo amenaza, simulando un secuestro. Una mujer del grupo grabó el incidente mientras los demás continuaban golpeando a los niños.
Horas después, los padres del tercer afectado, un adolescente de 15 años, denunciaron a Carabineros que su hijo había sido quemado con un cigarrillo en la oreja.
"A mi hijo lo torturaron. Son adultos, y andan en grupo atacando a niños indefensos", declaró el padre del afectado al citado medio.
A pesar de que Carabineros detuvo a los agresores, el Ministerio Público dispuso su liberación tras una breve detención.
Esto generó molestia y temor en las familias, quienes cuestionaron la medida y pidieron la intervención de la Defensoría de la Niñez y la Fiscalía, debido a la vulneración de los derechos de los menores.
“La violencia y tortura que sufrieron estos niños no puede quedar impune”, expresó el padre del menor de 15 años, y añadió que “son individuos peligrosos que no deberían estar en la calle, menos tras haber actuado de esta manera cruel y atemorizante”.