Una dramática situación quedó al descubierto durante las últimas horas en La Granja, debido a que una mujer, identificada como Eliana Ibacache (74), que falleció por COVID-19, estuvo en su ataúd en el living de su casa desde martes.
Todo porque desde la funeraria, tras una mala coordinación con el cementerio, decidió devolver el féretro a su casa.
En el inmueble se encontraba su nuera con sus dos hijas, quienes están cuarentena preventiva por haber sido contacto estrecho, tanto de la víctima fatal como del hijo de ella, quien se encuentra internado en el Hospital Padre Hurta por coronavirus.
Así, al estar todo el círculo cercano en confinamiento, no pudieron realizar adecuadamente los trámites para hacer los funerales, por lo que el cuerpo se mantuvo al interior de la casa.
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Los vecinos de la fallecida en la población Yungay, manifestaron su preocupación por la presencia del ataúd en el lugar, ya que -señalaron- podría también haberlos afectado a ellos.
Algunos de ellos conversaron con un equipo de Contigo en La Mañana, donde manifestaron que es “una situación completamente irregular”.
“Tenemos todos muchos sentimientos encontrados…la población vive cesantía pena hambre”, agregó.
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Pasadas las 13:00 de este jueves, finalmente la funeraria acudió al lugar y, entre aplausos de los vecinos, pudieron retirar el cuerpo de Eliana para sepultarla.
El alcalde de la comuna, Felipe Delpin, aseguró que "lo que hemos visto es un tremendo drama que se está viendo en las poblaciones. Aumenta el número de personas muertas, aumenta el número de personas contagiadas, los hospitales empiezan a colapsar y los cementerios también comienzan a tener problemas para la sepultura".
Así, el jefe comunal manifestó que espera que esta situación no se vuelva a repetir.
11/06/2020
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