Han aumentado su venta en un 582% y ya hay quienes han comenzado a fabricarlas en sus casas. Su uso se ha transformado en una costumbre, pero la Organización Mundial de la Salud aseguró que no serían esenciales y, según profesionales de la salud, habría otras medidas preventivas que serían más efectivas.
Seguramente, durante los últimos días no ha salido mucho de su casa. Pero si lo ha hecho, ha sido probablemente usando una mascarilla.
A pesar de que su utilización se ha hecho costumbre y que la venta de este producto se ha disparado, hay quienes sostienen que no es el método más eficaz, específicamente, la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En su último reporte, la OMS confirmó que el coronavirus no se transmite a través del aire. En base a la evidencia científica disponible hasta el momento, la agencia dependiente de Naciones Unidas informó que el COVID-19 es adquirido estando en contacto con las gotitas provenientes directamente de una persona enferma, a través de la tos o un estornudo.
Lee también: El coronavirus no se transmite a través del aire, confirma nuevo reporte de la OMSSegún expertos, por lo tanto, no sería imprescindible llevar mascarillas como medida de protección personal. Así lo explica Macarena Fuentes, enfermera y docente de la Universidad San Sebastián.
“Estas gotas alcanzan una distancia máxima de un metro. Por eso se pide respetar la distancia entre las personas. Las mascarillas quirúrgicas, que son las más simples y las que la gente usa en la calle, sólo sirven para las personas que están enfermas”, aclara.
Las hay de distintas formas, texturas, tamaños y colores. Es por ello que hay que saber diferenciarlas, en qué momento usarlas y por cuánto tiempo.
“La mascarilla quirúrgica contiene un material plástico que minimiza la salida de las gotas, pero solamente evita que el virus salga hacia el exterior. No están diseñadas para proteger de afuera hacia dentro. No sirven para protegerse del ambiente, pero sí son útiles para evitar la diseminación del virus, o sea, que éste no salga”, explica Fuentes.
De esta forma, la mascarilla sólo sirve para que un enfermo no contagie al resto, pero no es una barrera para las personas sanas. Este tipo de elementos no sería esencial a la hora de salir de la casa, por ejemplo, al momento de ir a un supermercado.
“Deberían usarla sólo personas con síntomas o con coronavirus diagnosticado, pero esas personas, en estricto rigor, debieran estar con cuarentena, por lo tanto, tampoco tendrían que salir”, subraya la docente.
Lee también: 5 universidades chilenas fabricarán 100 mil máscaras en impresoras 3DLa enfermera es enfática en que, además, las personas suelen utilizar las mascarillas por tiempos prolongados y superiores a lo que es debido: “La gente va a la farmacia, entra al auto, vuelve a la casa, y no se quita la mascarilla. Éstas duran un máximo de dos horas o hasta que se humedezcan, lo que sucede muy rápido”.
En la misma línea, añade que la humedad hace que el componente de la mascarilla pierda efectividad, así como también el lavado. Las mascarillas no son lavables ni reutilizables.
Pese a ello, las mascarillas, junto al alcohol gel, han sido dos de los productos más vendidos por las farmacias en el país.
Según Javier Appelgren, creador de Yapp -una aplicación gratuita que permite comparar precios de medicamentos y remedios- las cifras son contundentes: “En enero, la búsqueda de mascarillas en la plataforma llegaba a apenas un 0,03%, mientras que en marzo llegó a 3,6% y va en ascenso”.
Esto quiere decir que si en enero las personas buscaban un total de cien veces el producto por Internet, hoy lo hacen hasta 8 mil veces, presentando un 582% de incremento. Asimismo ocurrió con las ventas, hasta que se agotaron los elementos de protección: “Hay quiebre de stock. No hay mascarillas en casi ninguna farmacia. La demanda es altísima”, detalla.
Rodrigo Blamey, infectólogo de la Clínica Las Condes, apunta que ese es el motivo por el que en Chile no se aprueba el uso de estos elementos para la población general: “Si tú tienes poco stock y recomiendas a la gente usarla en todo momento, no habrá suficientes mascarillas en recintos hospitalarios, que es donde realmente está comprobado que sirven”.
Lee también: $50 mil por carga familiar o familia: Piñera promulga bono COVID-19 para enfrentar crisis sanitariaAsí como son varios los que salen a la calle utilizando mascarillas quirúrgicas, también se ha visto distintas medidas preventivas: desde pañuelos de género hasta el uso de mascarillas artesanales.
“Hemos visto de todo. Hay gente que usa elementos hechos en casas, pero también hay público general que usa mascarillas de alta eficiencia, lo que es un desperdicio de recurso, porque esos debieran ser usados por el personal de salud, cuidadores de enfermos y los mismos contagiados. Si un país tiene stock suficiente, se podría disponer de este producto para la población general, pero en una situación como la nuestra, de falta de stock, hay que priorizar a las instituciones de salud”, añade.
Asimismo, el profesional explica que es necesario dimensionar la peligrosidad por zona: “No es lo mismo tener dos o tres casos en una ciudad, que en ciudades como Santiago donde tenemos cientos. La exposición de la población va a depender de cuánto virus esté circulando”.
Según datos de la OMS, ubicarse a menos de un metro de una persona con síntomas respiratorios supone un riesgo de contagio. A esa distancia, estamos expuestos a las gotitas , partículas que quedan suspendidas en el aire cuando alguien tose o estornuda. Es por ello que, entre las recomendaciones básicas de protección de la entidad, no incluyen a las mascarillas.
En conclusión, las medidas de protección realmente efectivas son: