Una forma innovadora y que promete ser más eficiente que las pruebas actuales que además son invasivas. Un avance del país de Medio Oriente podría detectar si una persona porta el SARS-Cov-2 solo con hablar.
¿Podría bastar con la voz para saber si alguien es portador del SARS-Cov-2? Este el innovador sistema de detección temprana que Israel piensa poner a prueba dentro de los próximos días. A través de las cuerdas vocales, se podría saber eso, y mucho más, para lograr frenar el avance de la pandemia.
La carrera por aplanar la curva y encontrar, no solo una vacuna, sino maneras más eficientes de detectar los contagios es una que las potencias mundiales están tratando de ganar. Lee también: ¿Por qué la tasa de letalidad del COVID-19 en Alemania es mucho más baja que en otros países?"Dentro de la laringe están las cuerdas vocales, que es el órgano que produce fundamentalmente la voz. El poder detectar de forma precoz cambios de voz, podría significar la identificación de aquellos pacientes que ya están infectados por el virus", dijo el doctor Luis Cabezas, jefe del departamento de Otorrinolaringología en la Clínica Las Condes.
Olvidemos los cotonitos, test rápidos, jeringas y muestras de sangre. Todo lo que tenemos que hacer es hablar. El COVID-19 es una enfermedad respiratoria. Allí, uno de los órganos más sensibles a sus consecuencias es la laringe. Aquí es donde entra la tecnología, una que es capaz de decirnos si una persona es un caso positivo.
Actualmente, en Israel se están haciendo unos 3 mil test al día. La meta es aumentar a 10 mil, 20 mil y hasta 30 mil por día. La razón: esa es la clave para salir de la emergencia en la que estamos y traer de vuelta la sociedad y la economía.
Países como Alemania han demostrado que el seguimiento estricto a la cadena de contagios y la cantidad de test que son capaces de aplicar, reduce significativamente las muertes por COVID-19.
Por su parte, Israel ha dado a conocer la propuesta. Crearon "Vocalis Health", una aplicación que se basa en lo que se denomina biometría acústica, en la que mediante las ondas de la voz se captan elementos biológicos. Tal como en esta imagen con un micrófono.
"El pensar que puede ser usado para detección o seguimiento para pacientes con COVID-19, es interesante, porque me imagino que la hipótesis es al generarse una infección broncopulmonar, esto generaría trastornos en el habla que podrían ser detectados por el uso de una red neuronal súper potente y una base de datos super poderosa", comentó el académico César Galindo, subdirector de Interoperabilidad de la Universidad de Valparaíso.
Al escuchar nuestra voz el sistema genera un análisis bioacústico de nuestras cuerdas vocales. Ese registro es estudiado con un complejo análisis de datos. El que logra identificar una "huella vocal", que al igual que la de nuestros dedos, es única para cada persona.
"Si pensamos que esto se puede complementar con lo que ya se está usando en todo el mundo, que es el confinamiento, la cuarentena y el test, puede ser una herramienta que sea de mucha utilidad, siempre y cuando se alinee con plataformas nacionales que permitan integrar la información", agregó Galindo.
Su importancia radica en que es una alternativa que garantiza test de alcance masivo, seguros y que evitan aglomeraciones de pacientes en sospecha, que es precisamente, uno de los principales focos de contagio.
"Merlin" podría hacerlo en Chile. Esta empresa trabaja con big data o análisis de datos y han desarrollado "operadores robots", que han analizado incluso, mediante la voz, indices de obesidad, aseguran que si la herramienta israelí da resultados positivos, el test podría ser aplicado en todo el mundo, permitiendo identificar de manera no presencial, quien está contagiado, en qué lugar y que se puede hacer en su entorno para evitar más casos.
Lee también: Informe basado en big data proyecta el impacto del COVID-19 en Chile: Indica baja en contagios cuando hay cuarentenaEsta importante innovación está en proceso experimental y los resultados podrían estar dentro de seis meses. Tiempo en el que es fundamental ahondar en la ciencia que día a día nos sorprende.