Quedó la grande en
Gran Hermano Chile luego de una
broma que Constanza, Raimundo y Francisca decidieron hacer en su pieza, levantando un fuerte con diversas almohadas que imposibilitara que
Mónica -quien estaba dormida- pudiese verlos desde sus camas.
Todo partió como una idea de la bailarina y Pincoya -aunque esta última no puso ningún cojín-, para poder
hablar tranquilas y no molestar a la jugadora más longeva de la casa, quien usualmente los reta por hablar "muy fuerte".
Pero cuando la participante despertó y se percató del hecho,
fue a acusarlos en la otra habitación y así desató una pelea que perdió los estribos, sobre todo por los
gritos que Mónica le lanzó a Pincoya y sin ningún motivo que lo sustentara.
En ese contexto,
Raimundo quiso calmar los ánimos y aclarar todo para evitar malos entendidos. El problema fue que el resto de los competidores, en la denominada "pieza del after", se mostraron
reticentes a escuchar sus argumentos.
¿Qué pasó entre Raimundo y Rubén?
"
El primero que vino a la pieza fuiste tú a buscar almohadas. Y si se malinterpreta al tiro, vamos a poner una versión de que fuiste tú", acusó Rubén.
"No te vayas en esa", le replicó Rai, quien poco a poco se comenzó a molestar al ser increpado. "
Está bien que quieras quedar como superhéroe, pero no seas así (...) No tení de dónde ensuciar una imagen que no es", agregó.
"Eres el único que está agrandando... sí, yo vine a buscar los cojines, pero para hacer otra cosa y no para excluirla (a Mónica)", continuó Rai, explicando que el problema fue que su compañera
"pensó que habían espíritus, entonces la hue... se intensificó el doble".
Pese a que Rai estaba calmado explicando la situación,
Rubén continuaba interrumpiéndolo constantemente. Fue precisamente eso lo que llevó a que Cerda levantara la voz:
"Escucha. Hablai, hablai, hablai y hablai, pero no escuchai", le dijo al ex carabinero.
Finalmente, los involucrados
decidieron aclarar todo al día siguiente y así evitar una pelea aún mayor.