Ryan Grantham, de 24 años, le disparó a su madre en la cabeza y luego subió su cuerpo a un vehículo, emprendiendo así un viaje de 50 horas que tenía como destino la casa de la máxima autoridad canadiense. Los detalles del caso quedaron al descubierto en las audiencias de sentencia llevadas a cabo esta semana.
Un escabroso caso quedó al descubierto en 2020, luego que el actor Ryan Grantham, de 24 años, se entregara a la policía canadiense tras confesar el asesinato de su madre, Barbara Waite. Pero eso no es todo, ya que durante las tres jornadas de audiencia de sentencia llevadas a cabo esta semana en la Corte Suprema de Columbia Británica, quedaron al descubierto otras aristas de su plan.
Según se indicó en dichas instancias, el intérprete que tuvo una aparición en la serie Riverdale tenía como objetivo quitarle la vida al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau.
Debido a los hechos descritos en el juicio, el joven fue sentenciado a cadena perpetua al admitir su culpabilidad, consignó CBC. Asimismo, en la tercera fecha de las audiencias leyó una declaración en la que sostuvo estar arrepentido del asesinato de su madre, a quien le disparó por la espalda con un rifle mientras ella tocaba piano en su casa.
De acuerdo con la dinámica del suceso, el actor habría ensayado el crimen en diversas ocasiones. Pero no fue sino hasta el 31 de mayo de 2020 cuando apretó el gatillo después de haber pasado 15 minutos contemplando a su madre desde las escaleras.
Posterior a esto, cubrió su cuerpo con sábanas blancas y puso velas a su alrededor. Tomó una cámara GoPro, grabó la escena, y admitió haber sido el autor del asesinato. Luego, al día siguiente, subió el cuerpo a su auto, junto a tres pistolas, municiones, bombas molotov, elementos para acampar y un mapa con direcciones marcadas, para finalmente emprender un viaje de 50 horas hacia la propiedad de Justin Trudeau.
Grantham finalmente nunca llegó a la casa de la autoridad canadiense, y terminó por entregarse a la policía en Vancouver. No sin antes pensar en la posibilidad de dispararle a las personas que estuviesen en la Universidad Simon Fraser, donde estaba matriculado, o realizar un tiroteo en el puente Lions Gate u otros lugares.
Durante las audiencias, según el medio mencionado, la fiscal Michaela Donnelly hizo referencia a dos informes psiquiátricos que daban cuenta que el actor había pasado por un "período intenso de depresión clínica" previo al crimen, detallando que "experimentaba impulsos de cometer actos violentos y suicidarse".
Inclusive, los documentos plasmaron que Granthman "dijo que mató a su madre para evitar que viera la violencia que pretendía cometer".
Otro factor clave a considerar es que la mujer padecía de cáncer, sin embargo, la persecutora sostuvo que pese a que "los motivos de Ryan para matar a su madre podrían parecer altruistas", él solo buscaba "salvarla de algo que iba a hacer", lo que en su conclusión es "muy diferente al altruismo".
En la última jornada del proceso legal en su contra, el joven leyó la siguiente declaración: "No puedo explicar ni justificar mis acciones. No tengo excusa. Me duele pensar en lo mucho que desperdicié mi vida. Frente a algo tan horrible, pedir perdón parece tan inútil. Pero desde cada fibra de mi ser, lo siento. Algún día, si alguna vez salgo de prisión, espero continuar en este camino de mejorarme".
Respecto de su carrera, Grantham se desempeñó en producciones como Supernatural y Riverdale, o la película El imaginario mundo del Doctor Parnassus.