A 30 metros de profundidad se encuentra el origen del mineral que está modelando el futuro. Se trata del litio, que surge de la salmuera que se extrae para ser evaporada, proceso que en Chile se realiza en pozas ubicadas el Salar de Atacama. El país cuenta con 44 kms2, equivalentes a 6 mil canchas de fútbol, para extraer este mineral y ahora creará el Instituto Tecnológico del Litio en Antofagasta, para así pasar de una industria extractiva a una que agrega conocimiento. El litio es el elemento más liviano después del hidrógeno y el helio, por lo que tiene un potencial electroquímico muy grande y almacena mucha energía en poco peso. Por esta razón ha sido altamente demandado en los últimos años, para la elaboración baterías recargables, como las de celulares o de un notebook, pero también para la elaboración de medicamentos, cerámicas, vidrios o cocinas eléctricas, gracias a su capacidad de soportar altas temperaturas.