Mediante un comunicado, indicaron que los efectos de la enfermedad son moderados, pero que "requieren ser abordados con equipo especializado".
"Los efectos de la enfermedad, aunque son moderados requieren ser abordados con equipo especializado, para evitar posibles complicaciones", expresó el vicario general, Cristian Roncagliolo, en un comunicado.
También se encuentra hospitalizado desde el domingo pasado el obispo auxiliar de Santiago, Alberto Lorenzelli, que ingresó en el mismo complejo hospitalario pocos días después de que comenzara a experimentar los síntomas de COVID-19.
Lee también: Investigador U. de Chile destacó que el proceso de vacunación ha ayudado a disminuir contagiosDesde la institución, informaron que el estado de salud de Lorenzelli "no ha tenido cambios significativos" en las últimas 24 horas y sigue necesitando cuidados hospitalarios.
Ambos obispos habían recibido ya las dos dosis de la vacuna del laboratorio chino Sinovac de acuerdo al calendario de vacunación y la última dosis la habían obtenido el pasado 11 de marzo, aseveró el comunicado.
Aós, arzobispo de Santiago desde diciembre de 2019, fue nombrado cardenal por el papa Francisco en el consistorio del pasado 28 de noviembre.