El subsecretario del Interior explicó "para expulsar no basta que Chile firme un papel, sino que además el país donde se expulsa una persona tiene que estar disponible a recibirla".
(EFE/CHVNoticias) — El subsecretario del Interior,
Manuel Monsalve, afirmó este viernes que un
equipo de Cancillería está en
Venezuela "buscando un acuerdo" que permita la
expulsión y repatriación de personas migrantes, con una
crisis que aún se desarrolla en la
frontera norte con
Perú.
"Hay veces que nos olvidamos que
para expulsar no basta que Chile firme un papel, sino que además
el país donde se expulsa una persona tiene que estar
disponible a recibirla", explicó Monsalve.
"Podemos firmar miles de decretos de expulsión, pero
si Venezuela no permite el ingreso de aviones a su espacio aéreo, si el consulado venezolano no entrega papeles a los ciudadanos que se van a expulsar, no los podemos expulsar", agregó.
El pasado domingo, un avión trasladó hasta Venezuela a un total de
115 migrantes varados desde hace semanas en la frontera norte, que no podían retornar a territorio chileno ni ingresar a Perú por
carecer de documentación.
El vuelo, que partió rumbo a Caracas desde la ciudad de Arica, 2.000 kilómetros al norte de Santiago, fue costeado por el gobierno de Nicolás Maduro y forma parte del programa "
Vuelta a la Patria", gracias al cual ya
han retornado cerca de 30.000 venezolanos desde 25 países distintos, según cifras oficiales.
“Esto no se puede hacer sin acuerdos diplomáticos con ese país, y eso es lo que ha hecho este gobierno: ha l
ogrado un primer acuerdo político con los venezolanos que permitió el despegue del avión", apuntó Monsalve.
Chile, que mantiene su frontera militarizada desde finales de febrero, ha endurecido en los últimos tiempos
sus políticas contra la migración irregular para tratar de frenar el
aumento de la inseguridad, lo que ha provocado que
miles de migrantes traten de abandonar el país.
Perú, por su parte, decretó hace dos semanas el
estado de emergencia por 60 días en sus fronteras y ordenó el envío de militares para reforzar la vigilancia.
La crisis en la frontera común y la militarización han sido ampliamente cuestionadas por organismos como
Amnistía Internacional y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), además de elevar considerablemente la
tensión política entre
ambos Ejecutivos.
El
presidente Gabriel Boric calificó el primer vuelo de repatriación como un
"triunfo diplomático" y aseguró que seguirá "permanentemente" en contacto con otros gobiernos de la región para
enfrentar la crisis migratoria.