La iniciativa fue presentada por el diputado José Miguel Castro (RN), junto al apoyo de parlamentarios de su misma bancada e independientes. “No podemos permitir que ahora los delincuentes tengan bandas sonoras y que sean ejemplos para los niños", dijo el autor del proyecto.
Parlamentarios de la Cámara de Diputadas y Diputados ingresaron un proyecto de ley que busca prohibir cualquier tipo de incitación o llamado al consumo de drogas y al uso y porte ilegal de armas de fuego en canciones y videoclips.
La iniciativa fue presentada por el diputado José Miguel Castro (RN), junto al apoyo de los compañeros de bancada Sofía Cid, Sara Concha, Marcia Raphael y Andrés Celis, además de René Alinco (IND-PPD) y Tomás Lagomarsino.
Lo anterior, según detallaron los legisladores, responde a la creciente preocupación sobre hechos de violencia y drogas en que se han visto involucrados menores de edad. Según informó Carabineros, por ejemplo, de los 3.155 jóvenes detenidos por robos en el último año y medio, el 65% ha cometido robos violentos (2.058), los que incluyen "portonazos" y encerronas. De hecho, por este último tipo de delito, han sido aprehendidos 317 niños, niñas y adolescentes, de los cuales el 61% tenía entre 16 y 17 años al momento de infringir la ley.
A eso se suma la irrupción de la nueva droga rosa, denominada “Tussy”, que está compuesta por Ketamina, anfetaminas y colorantes, cuyo decomiso ha aumentado en un 1.400%.
“Este proyecto de ley previene que nuestros niños se familiaricen con escenarios de violencia y consumo de drogas, al menos dentro de los recintos educacionales, donde lo lógico es que sea un lugar de aprendizaje y con un ambiente sano para formar mejores personas. No estamos en contra de la música urbana o algún género en particular, pero creemos que no corresponde que en los colegios se escuchen aquellas canciones que incitan a delinquir”, dijo el diputado Andrés Celis.
En este sentido, el diputado José Miguel Castro afirmó que “no podemos permitir que ahora los delincuentes tengan bandas sonoras y que sean ejemplos para los niños; en el entorno educacional no lo permitiremos".
"Los niños están en plena formación y debemos procurar que el colegio sea un lugar seguro, donde prevalezcan contenidos que fomenten buenas prácticas y no repliquen ejemplos que pueden ser nocivos para su desarrollo. Es lógico que fuera de ese contexto pueden enfrentarse a juegos violentos, películas, etc, pero el Estado debe procurar un ambiente sano y libre de violencia, drogas y armas”, agregó el autor del proyecto.
De aprobarse la iniciativa, esta regiría en todos los establecimientos educacionales, pero además se extenderá en todas las actividades recreacionales que se realicen fuera de éste pero en el mismo ámbito educacional, como paseos de curso, kermeses, y actividades extra programáticas, y de incumplirse la sanción podría llegar a las 500 UTM ($30 millones).