Preocupación ha generado la situación que se está viviendo en el Lago Peñuelas, luego que de las más de 1.700 hectáreas que abarca sólo 80 tengan agua.
Esto representa aproximadamente un 5% de lo que era la superficie original del lago.
La sequía inminente que podría experimentar el Lago Peñuelas tiene su origen en la escasez hídrica y falta de lluvias, así como los incendios que han afectado la zona.
Un panorama desértico es el que se puede apreciar actualmente en la zona, el cual forma parte de la Reserva Nacional Lago Peñuelas.
El administrador de la reserva, Óscar Salazar, aseguró que la baja de agua "es considerable" y advirtió que bajo las condiciones actuales el lago podría desaparecer.
"Es probable que si seguimos con estas condiciones de temperaturas altas la evaporación va a ser mucho más rápida y hay posibilidades de que el cuerpo de agua llegue a un mínimo extremo", aseguró Salazar.
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El factor de los incendios ha sido también de alta relevancia a la hora de hablar de la escasez hídrica del Lago Peñuelas, ya que los árboles colindantes ayudaban a mantener la humedad.
Al mismo tiempo, cuando se destina helicópteros para hacer frente a los incendios en la región estos obtienen su agua del mismo lago, generando así un círculo vicioso.
Ariel Muñoz, académico del Instituto de Geografía de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, señaló que "cuando proyectamos plantaciones forestales como las que rodean mayoritariamente el Lago Peñuelas, no sabemos cuánta agua consume un árbol como para saber cuántos árboles debiésemos plantar en ese lugar".
En ese sentido, Muñoz planteó que es necesario planificar mejor la disposición de cultivos agrícolas, forestales y el uso humano -si así fuera el caso- antes de plantar en cualquier lugar del país.
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13/01/2020
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