Un joven de 26 años es el vivo ejemplo de que los resultados de la Prueba de Transición o del proceso de admisión no tienen por qué definir el futuro de las personas. Franco Núñez se dedicó a emprender para pagar el CAE y hoy ya piensa en abrir su propia cafetería.
El domingo se dieron a conocer los resultados de las postulaciones a las universidades de los estudiantes que rindieron la Prueba de Transición Universitaria. El momento marca un antes y un después en la vida de muchos, pero otros también se las arreglan para salir adelante aunque sus puntajes hayan sido bajos y no les alcance para acceder a una carrera rentable.
Tal es el caso de Franco Núñez (26), un joven que no ponderó más de 450 puntos cuando dio la PSU y que incluso asegura que se quedó dormido durante la prueba de Lenguaje. Hoy, tiene tres negocios.
El caso de Franco fue destacado por Las Últimas Noticias: hoy es es licenciado en Educación, profesor de Educación Física, trabaja en el Mineduc y es dueño de tres negocios en El Tabo.
Las tres tiendas están ubicadas en Poeta Jonás 964: una es de artículos tech, otra de accesorios para niñas y la tercera vende artículos esotéricos.
Lee también: Pesar en la gastronomía chilena: A los 82 años murió la dueña de la picada Doña TinaEl joven contó que su mamá siempre tuvo negocios y él solía ayudarla. Así, fue aprendiendo hasta que se hizo cargo de uno de los locales mientras estudiaba.
"Luego terminé la universidad, pero no encontraba pega en ningún lado y el fantasma del CAE me empezaba a perseguir, así que decidí aventurarme y darle con todo al negocio. Me dediqué a emprender", relató.
El camino tuvo sus dificultades: "me caí harto también, incluso perdiendo inversiones grandes, pero en estas cosas no existe el fracaso, sólo el aprendizaje".
Ahora, su sueño es abrir una cafetería en Algarrobo.