Contra el tiempo están las negociaciones por la reforma de pensiones comprometida para enero de 2025. Hay problemas con los plazos y tiempos de diputados y senadores debido a las semanas distritales. Por otro lado, el receso parlamentario de febrero pone en tensión al gobierno. Más allá de eso, los puntos críticos de la reforma parecen ser también otro problema para poder obtener los acuerdos.