“No hay derechos sin deberes” fue la polémica afirmación del director del INDH que lo llevó a dar explicaciones en un consejo del organismo. Asegura que la interpretación que se hizo de sus declaraciones "fue extremadamente de mala fe” y que no estaba hablando sobre derechos humanos.
Durante el consejo realizado el lunes por el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), su director, Sergio Micco, se refirió a la polémica frase “no hay derechos sin deberes” y acusó "mala fe".
Sus palabras corresponden a una entrevista otorgada a El Mercurio, y estas fueron criticadas tanto por funcionarios del INDH como por la Comisión Chilena de Derechos Humanos y algunos políticos, como la diputada Carmen Hertz (PC), quien lo trató de "muy ignorante en DD.HH.”.
Durante el consejo, Micco aseguró que "el ejemplo que yo puse y evidentemente eso fija el tenor de la declaración, es claramente un deber que podríamos decir es ético, donde yo señalo que evidentemente el derecho a la salud no tiene una compresión concreta si no es por el personal".
"Leo a la letra: 'El derecho a la salud no significa nada si no es personal de salud que literalmente está dispuesto a morir cumpliendo con su deber más allá de lo exigido. Como INDH estamos dispuestos a ir con los internos a Puente Alto cinco veces, el mayor eco de foco contagios en Chile'. Eso es nuestro deber y si ustedes ven, leen con atención la declaración yo nunca hablé de derechos humanos y muchísimo menos lo que consigné", comentó.
Lee también: “La discriminación es otra pandemia que debemos detener”: INDH llama al Estado a proteger a los migrantesMicco dijo que considera "que es una verdad innegable, un derecho es siempre algo que se debe a otros. Si yo tengo un derecho es porque alguien me tiene que cumplir con su deber respectivo, a mí me parece obvio y eso es lo que dije en la entrevista".
Además, indicó que se le acusó de no conocer la doctrina de los DD.HH. y relativizarlos, "lo que evidentemente son declaraciones extremadamente fuertes y quiero decir que si se les toma así, literalmente el camino es pedirle la renuncia al director o directora porque evidentemente un director del INDH no puede revitalizar los DD.HH".
"Yo creo que la interpretación que se hizo de mis declaraciones fue extremadamente de mala fe”, aseguró. Y ante la solicitud de rectificar sus dichos, manifestó: "¿de qué me voy a rectificar, si yo estoy de acuerdo con lo que dije? No soy Carlos Caszely”.