La primera ministra británica renunciará a su cargo el próximo viernes 7 de junio, ante las diferencias con el parlamento británico por el acuerdo del brexit.
Con la voz quebradiza y muy emocionada, la primera ministra británica Theresa May informó en una conferencia de prensa que dejará su cargo dentro de dos semanas, reconociendo de paso su fracaso en su intento de concretar el brexit.
“Desde que crucé por primera vez como primera ministra la puerta que está detrás de mí me he dedicado a hacer del Reino Unido un país que funcione no solo para los privilegiados, sino para todos, y para respetar el resultado del referéndum", con el que se decidió la salida del país de la Unión Europea, señaló May.
Agregó que "lo intenté tres veces" pero "no fui capaz" de lograr que el Parlamento aprobase el texto.
"Creo que era correcto perseverar incluso cuando las posibilidades de fracasar parecían altas, pero ahora me parece claro que el interés del país es mejor que un nuevo primer ministro lidere ese esfuerzo", remarcó la primera ministra al borde de las lágrimas.
A continuación, confirmó que dimitirá como líder del Partido Conservador el próximo viernes 7 de junio. Por el momento, seguirá en el cargo para recibir al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que visitará el Reino Unido del 3 al 5 de junio.
Durante la semana siguiente se concretará el proceso para elegir a su suceso. Por ahora, el único que anunció oficialmente su ambición de ser escogido es el ex ministro de Relaciones Exteriores, Boris Johnson.