"Tengo una estudiante de primero básico. Si ella se ausenta del colegio por un largo período de tiempo, olvidará cómo tomar un lápiz y cómo escribir", comentó la menor de la ciudad de Gaza.
El 3 de marzo fue el último día que tuvieron clases presenciales y ante la imposibilidad de seguir con su educación, una niña de 13 años decidió realizar un aporte a su comunidad.
Se trata de Fajr Hmaid, quien se convirtió en una profesora para los más pequeños del su vecindario en la ciudad de Gaza, la capital de la Franja de Gaza, donde también enfrentan la pandemia del nuevo coronavirus.
Ella quiere ser profesora tras terminar el colegio y por eso decidió hacer de su patio una improvisada, pero funcional, sala de clases para los niños más pequeños.
Lee también: Cuando se protesta por pasar hambre: Radiografía a los chilenos más afectados por la cuarentena"Quería traerlos acá y enseñarles, ese es mi talento", comentó la preadolescente al medio DailySabah.com.
En la misma línea, contó que "tengo una estudiante de primero básico. Si ella se ausenta del colegio por un largo período de tiempo, olvidará cómo tomar un lápiz y cómo escribir".
Pese a las medidas de cuarentena en esa ciudad, se han elevado voces denunciando lo corto del equipamiento médico para testear a las personas y poder tratarlas en caso que se desate una ola más grande de COVID-19.