La bailarina se fue a vivir a Estados Unidos junto a Mark González y sus dos hijos por motivos de seguridad, según contó en redes sociales. Sin embargo, no todo ha sido color de rosa.
Hace solo unos días
Maura Rivera contó que, tras 12 años viviendo su hogar,
abandonó su casa en Chile para establecerse en Miami, donde adquirió una propiedad junto a
Mark González y sus dos hijos.
"¡Iniciamos una nueva vida en nuestra nueva casa!", expresó en su cuenta de Instagram, donde subió un par de fotografías con su esposo frente a la que parece ser su nueva vivienda.
Hasta ahí todo bien, sin embargo, utilizó sus stories para contar un
pequeño drama que sufrió respecto al traslado de sus mascotas.
De acuerdo a su relato,
su perro llamado Blak tuvo que viajar por Cargo, en un canil especial mandado a hacer especialmente para él, debido a que su
tamaño y peso supera lo permitido por la aerolínea.
"Los demás viajan el jueves, que son
mis dos gatos con mi perro que vienen con mi suegra y mi cuñada que nos vienen a acompañar por unos días y además, nos hacen el favor de traernos a nuestros animalitos, pero
yo no podría vivir o estar sin ellos porque son parte de mi familia", expresó la bailarina.
"Nadie dijo que sería fácil", escribió en el video que compartió.