Ante la salvación de
Rubén de la eliminación en
Gran Hermano Chile, Julio César Rodríguez
se acercó a la familia del participante para preguntarse sobre este logro. En este sentido, la hermana del jugador habló en nombre de todos para confesar que
"han sido dos meses super difíciles", ya que han recibido "
amenazas de muerte y de golpes" además de constantes
malos comentarios. Tras esta declaración,
JC recordó a los usuarios de redes sociales"esto es un juego", puesto que estos malos tratos lo están recibiendo todas las familias de los jugadores, asimismo comentó que "
queremos hinchas, pero buenos hinchas."