El Lago Ranco, ubicado en la Región de Los Ríos, está siendo foco de una invasión a sus aguas. Los responsables son los nuevos habitantes de la zona, quienes aprovechando los vacíos de una regulación, han llegado con sus patios y construcciones hasta las orillas del lago. Antiguos pobladores de la zona han atestiguado con impotencia estos hechos que los están dejando cada día con menos terrenos para visitar, con una playa cada vez más reducida. Uno de los denunciantes es Eduardo Calisto, dirigente social de Lago Ranco, quien reveló el método que utilizan estos compradores de terrenos para apropiarse de las playas: “La estrategia es realizar un muro de contención muy cerca del agua y, posterior a eso, hacer un relleno que pasa a ser parte de su jardín y de su propiedad privada, según ellos”, expuso.