Hace un año algunos privados cerraron los accesos a las playas públicas en sectores rurales de Pichilemu y aunque la mayoría de los portones fueron derribados, la historia se repite. Es que nuevamente dueños de predios han impedido el paso libre de las personas a los balnearios. Camilo Jiménez, del Movimiento Playas para Todos, acusa que aunque el dueño de un predio habilitó una ruta alternativa para llegar a la costa, se trata de "un camino diseñado para restringir el paso", ya que es doblemente larga que la tradicional, es de sólo un sentido y además, tiene una serie de zanjas. Un equipo de CHV Noticias recorrió el lugar y fue testigo de lo difícil que se hace acceder a la playa. En tanto, desde el Ministerio de Bienes Nacionales aseguran que "nadie está sobre la ley" y advirtieron que la multa puede llegar hasta $10 millones.