"El año 2017 salí y cuando volví habían cambiado los candados. Yo no tenía a nadie que me ayudara, no tenía familiares a quien recurrir", contó Xavier Buhl, quien padece una enfermedad que lo mantiene en una silla de ruedas y con serias dificultades para trasladarse.
"El año 2017 salí y cuando volví habían cambiado los candados. Yo no tenía a nadie que me ayudara, no tenía familiares a quien recurrir", contó Xavier Buhl, quien hace 4 años salió de su casa para realizarse un tratamiento médico, se ausentó por unos días y cuando volvió ya no pudo entrar a su hogar. Al interior había otros ocupantes que en ese período de tiempo se habían tomado la propiedad. "Esperé a una patrulla de Carabineros que pasó, les conté lo que había pasado y les pedí por favor que rompieran los candados porque quería entrar a mi casa", relata Xavier. Pero los funcionarios no lograron ingresar y desde entonces este hombre ha vivido en distintos lugares, incluso al intemperie. Pasó la noche en albergues y varios meses en una residencia del Hogar de Cristo. Perdió su trabajo, su hogar y hoy vive de allegado donde sus vecinos. El hombre padece una enfermedad que lo mantiene en una silla de ruedas y con serias dificultades para trasladarse. Por lo mismo, hoy más que nunca su único anhelo es recuperar su propiedad en la que ahora vive una familia. Lya Rojas, directora de Rojas Abogados, aseguró que "el dueño de ese inmueble podría intentar una acción civil de comodato precario para obligar a los ocupantes a restituirle la propiedad, incluso con el auxilio de la fuerza pública". Pero debido a la pandemia, dichos procedimientos se están tardando desde 6 meses hasta un par de años.