undefined
23/08/2019 21:15

De Suecia al resto del mundo: Los jóvenes chilenos que se inspiraron en Greta Thunberg

Han cambiado su dieta, su estilo de vida y dejan de ir al colegio los viernes para protestar. Así es la historia de dos jóvenes que decidieron hacer acciones para generar conciencia en nuestro país.

Publicado por Administrador

Hace un año que una adolescente de 15 años está haciendo pensar al mundo que algo esta pasando en el planeta y que está en nuestras manos manejar

Fue el 20 de agosto de 2018 cuando Greta Thunberg, la activista por el cambio climático, decidió dejar la sala de clases un día viernes por una plaza frente al parlamento sueco.

Lee también: "Huelga escolar por el clima": Se cumple un año desde que Greta Thunberg inició su lucha por el cambio climático

Cambió cuadernos y exámenes por un cartel que anunciaba que estaba en "huelga escolar por el clima". Desde ahí la historia se comenzó a escribir

A su protesta de cada viernes se sumaron, primero, 30 personas. Pero con el tiempo se fue sumando más y más gente hasta que se convirtió en una iniciativa global que llegó a Chile y se expandió a 28 ciudades a lo largo del país.

"Me volví vegetariano, comencé a reciclar y mi tío me dijo 'deberías ser como Greta, que salió afuera, haciendo acciones que sirvan, ir a protestar y ser como ella'", cuenta Rafael miembro de Fridays fot Future Santiago.

Más al sur, otra joven, Valentina Chavarría, lidera el movimiento en Valdivia, donde también resignaron ir a clases para protestar y generar conciencia.

"Nunca se había visto que se le esté dando un espacio público a una representante de tantas personas, de una lucha que lleva muchos años y eso es lo que queda en mí y que siento que ha quedado en todos los jóvenes en este momento”, comenta.

Valentina no sólo se inspiró en la joven sueca para salir a protestar, sino que también decidió cambiar su estilo de vida. Decidió ser vegana al igual que Greta, todo para contribuir a un mejor planeta, ya que lo que alerta Greta, ella también lo vive en su región.

“Los jóvenes somos los que vamos a heredar el futuro y quienes vamos a vivir el futuro”, señala Valentina mientras camina por los bosques de Valdivia quien agrega que "de a poco hemos ido expandiendo el mensaje, depositando esta semilla de consciencia".

Dos historias que reflejan a una generación dispuesta a cambiar hábitos y estilos de vida para beneficiar el futuro de nuestra vida en el planeta.

Uno en el que viven las personas que aún no creen en sus voces, pero que más temprano que tarde sabrán que el cambio climático no es un juego de niños, aunque ellos sí son sus agentes de cambio.

Publicidad