Una investigación de Odecu, aseguró que la leche que es deshidratada y convertida en polvo, pero que luego recupera su forma líquida al ser mezclada con agua, mantiene su aporte nutricional. Esto luego que el año pasado surgiera una polémica ciudadana que llamaba a no consumir marcas sometidas a este proceso.
A la hora de elegir cuál leche comprar hay que tomar más en cuenta el precio y no tanto su calidad ¿Por qué? Porque todas son, prácticamente, iguales. O al menos así lo concluyó un estudio de leches líquidas blancas hecho por la Organización de Consumidores y Usuarios (Odecu).
Se trata de un estudio originado por la intensa controversia durante el año pasado sobre las supuestas diferencias de calidad entre las leches naturales y las reconstituidas.
Lo anterior, debido a que las primeras sólo pasan por un proceso de pasteurización y las segundas son sometidas a altas temperaturas para ser transformada en polvo, facilitando su transporte, recuperando posteriormente su forma líquida al ser mezclada con agua.
Incluso, hubo un llamado ciudadano a preferir una marca por sobre la otra, por ser menos procesada. Sin embargo, la investigación derriba ese mito.
Lee también: Colún vs. Soprole: Diferencias entre una leche natural y una reconstituidaEn el estudio se analizaron 30 muestras, 24 de leche blanca líquida con lactosa y 6 de leche líquida blanca sin lactosa. Todas de 8 marcas distintas y de mayor venta del mercado.
"Desde el punto de vista de las macronutrientes, son todas las leches iguales", aseguró Stefan Larenas, presidente de Odecu.
En la organización explicaron que el estudio realizado en el laboratorio SGS, es sólido en su conclusión. Más allá de la marca y del precio, todas las leches analizadas presentan una composición muy similar de los nutrientes intrínsecos de la leche, como las proteínas, las grasas, hidratos de carbono, calcio, etc. Por lo tanto, no existen grandes diferencias entre ellas.
Si bien se analizaron los componentes de cada marca de leche y sí se detectaron variaciones entre ellas, por ejemplo, en la presencia de grasas saturadas, éstas se consideraron marginales. Lo que sí determina el estudio es que, en sus envases, pocos productos aclaran si se trata de leche reconstituida o no.
"Yo creo que esta guerra blanca jugó en contra, porque, obviamente, se vio el concepto de reconstituida como algo negativo. Si una de las marcas ocupa este proceso, prefiere no informarlo", explicó Nicole Aguilera, nutricionista asesora de Odecu.
Posiblemente, al pasar de líquida a polvo y luego ser mezclada con agua, la leche reconstituida pierde algunos nutrientes, pero su calidad nutricional, según el estudio, sigue intacta.
"Estas mismas marcas, que promueven una cosa versus otra, obviamente juegan con el mercado y suben los costos de esta leche (natural), siendo que otra que, probablemente tiene un costo inferior (reconstituida), entrega las mismas calidades nutricionales", remarcó la nutricionista.
Ante esto, desde Soprole aseguraron que el estudio "es una buena noticia, porque aporta información clara y contundente a los consumidores respecto de la calidad de la leche chilena".
Sobre la llamada "Guerra de la leche blanca", explicaron en un comunicado que "coincidimos en que las informaciones que han circulado por redes sociales, que ponen en duda el origen y las características nutricionales de distintas leches, han sido perjudiciales para los consumidores".
Mientras que en Colún no se refirieron a los resultados sobre la calidad de la leche líquida realizado por Odecu.